En sus primeras palabras como mandatario de Estados Unidos, Joseph Biden enfatizó en que solo con unión se logrará recuperar el país para convertirlo, de nuevo, en la "fuerza de bien" del mundo. Prometió luchar por todos, tanto por los que votaron por él como por los que no
El primer discurso que ofreció Joseph Biden como mandatario de Estados Unidos, se concentró en lograr la unión de todos los estadounidenses como la única manera de recuperar la nación.
Apalancó esta solicitud en la difícil situación del país, con más crisis que en gran parte de la historia contemporánea, y el actual enfrentamiento entre estadounidenses al que definió como «una guerra civil», que tuvo su demostración máxima en el asalto al Capitolio, al que denominó «terreno sagrado».
Biden aseguró que luchará por el bienestar de todos los ciudadanos, hayan votado o no por él. Pidió a todos tolerancia y ponerse, unos instantes, «en los zapatos del otro».
Estos son 12 de los fragmentos más resaltantes del primer discurso de Joe Biden como presidente de Estados Unidos:
«Este es el día de Estados Unidos, de la democracia, la historia, la esperanza, la renovación y la decisión. Hoy celebramos el triunfo de una causa, la causa de la democracia. Hemos aprendido que la democracia es valiosa y frágil pero ha prevalecido».
«En este terreno sagrado donde hace unos días la violencia sacudió los cimientos del Capitolio, nos unimos como una sola nación. Vemos hacia adelante y fijamos la mirada en la nación que debemos ser y que podemos ser».
«Tenemos mucho que hacer en este invierno de peligro. Hay mucho que reparar, mucho que sanar, pero también mucho que ganar».
«Pocas personas han encontrado más dificultades que el momento que pasamos ahora. Este virus ha tomado muchas vidas en un año, el equivalente a las vidas que perdió Estados Unidos en las dos guerras mundiales».
«El grito por una justicia racial nos conmueve. El sueño de una justicia para todos no se va a postergar más».
«Podemos hacer que Estados Unidos sea, de nuevo, la fuerza de bien para el mundo».
«Sé que hablar de unidad puede sonar como una fantasía loca para algunos. Sé que las fuerzas que nos dividen son profundas. Pero también sé que no son nuevas. Nuestra historia ha sido una lucha constante entre el ideal estadounidense y el racismo, el temor y la demonización. La batalla es perenne».
«La política no tiene que ser incendiaria ni destruir todo a su paso (…). Compatriotas, tenemos que ser distintos y mejores que eso».
«La discrepancia nunca debe llevar a la desunión. Prometo que seré un presidente para todos. Voy a luchar por los que me respaldaron como por los que no».
«San Agustín, un santo de mi iglesia, escribió que pueblo es lo que se reúne alrededor de elementos que aman. ¿Cuáles son esos elementos que nos unen? La libertad, el honor, el respeto, la oportunidad y el honor».
«Tenemos que terminar con esta forma de guerra civil que nos pone en contra a republicamos y demócratas. Podemos hacerlo si somos tolerantes y si, por un momento, nos ponemos en los zapatos de las otras personas. De eso se trata la vida».
«Siempre defenderé la verdad. Siempre defenderé a Estados Unidos. Dedicaré todo mi servicio a escribir una historia de unidad, esperanza y luz. Una historia de decencia y dignidad, amor y sanación, de grandeza y de bien. Que sea la historia la que nos inspire. Y que Dios nos ilumine».
