Educación

Los niños postpandemia vuelven a las aulas

Los niños postpandemia que regresan este año escolar a clases, no son los mismos que hace 18 meses sacamos de las aulas por una pandemia que aún circula entre nosotros y que no tiene fecha para su fin

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niños postpandemia

Los niños en Venezuela van a comenzar clases presenciales, según lo anunció el gobierno de Nicolás Maduro. La fecha propuesta es el 25 de octubre, sin embargo, algunas instituciones privadas se lanzaron a aplicar planes pilotos de actividad semi presencial, en donde quisieron poner en práctica medidas de bioseguridad estudiadas para el inicio formal de la escolaridad.

Si algo quedó claro en estas pocas semanas en las que nuestros hijos volvieron a los colegios, es que ni ellos ni los padres estamos preparados para estos tiempos que podemos llamar postpandemia, incurriendo en el error de dar por terminada una crisis sanitaria que, al menos en el caso venezolano, se encuentra más viva que nunca.

Nuestros niños transitaron meses de confinamiento separados de sus pares, alejados de sus actividades cotidianas. Vieron alterados todos sus hábitos, sufrieron la pérdida de seres queridos e, incluso, aprendieron a convivir con el miedo. Cabe preguntarnos si estos niños postpandemia están emocional y psicológicamente preparados para una “normalidad escolar” o si los educadores están listos para responder a la realidad emocional que estos niños llevan a cuesta.

Foto Max Fischer / Pexels

Más paciencia y comprensión

Hace más de 12 meses los sacamos de un lugar seguro, las escuelas, y los llevamos a casa donde aprendieron que permanecer allí era la mejor forma de mantener con vida a los suyos y a sí mismos. Hoy de nuevo les cambiamos la realidad, sin previo aviso y sin la preparación necesaria, comenzamos un camino de acompañamiento que requerirá de mucha más paciencia y de mucha más comprensión de la escuela y la familia.

La psicopedagoga venezolana Betina Ferrer comenta que la experiencia que ha podido recoger con sus pares de otros países en donde las clases presenciales han comenzado, es que los niños pequeños lloran cuando deben separarse de sus padres y quedarse en la escuela.

Foto Pixabay

“Les ha costado más de lo habitual socializar con otros niños, compartir a la hora de ir al patio de recreo, centrar su atención ante las actividades que se deben realizar y mantenerse sentados en sus puestos de trabajo”, dice.

Advierte que los niños de primaria podrían sentirse presionados para rendir ante las exigencias del nuevo año escolar. “A muchos quizás les cueste agarrar el ritmo de clases. Se podrán sentir que demoran en copiar las tareas al ritmo que se les exige en esos niveles, ya que durante las clases a distancia pudieron hacer las tareas en el horario escogido, con un margen de tiempo amplio y a la velocidad que ellos quisieran”.

Foto Pixabay

Para Ferrer “el retorno a clases presenta numerosos desafíos emocionales y psicológicos que padres, alumnos y profesores tendrán que afrontar en los próximos meses, y que les exigirán una permanente capacidad de adaptación”.

También es cierto que la escolaridad a distancia ha dejado claras las brechas digitales existentes, la desigualdad en esa mal llamada democratización del internet y en el acceso a la información. La experiencia educativa en estos meses a distancia de un niño con servicio de internet frente a otro que no cuenta con ninguna prestación técnica, nos muestra la falta de preparación frente a un mundo que cada vez apunta más a la digitalización.

La estabilidad emocional sí importa

A esta alturas de la historia y luego de meses en los que en el mundo han muerto más de 4 millones de personas, no tengo claridad sobre las prioridades en cuanto a la asistencia presencial de mi hijo al colegio.

Sé que como ser social en pleno crecimiento necesita del “mundo” pero, estamos el colegio y los padres preparados para entender que un niño siente miedo, para saber que vive la presión de lavarse las manos y ponerse alcohol a cada comento, de vivir con un tapabocas obligatorio por al menos 6 horas al día, que no podrán abrazar a sus amigos o compartir la merienda.

niños postpandemia
Foto Luis Quintero / Pexels

A estos niños postpandemia les toca naturalizar lo que sencillamente no puede considerarse normal y a nosotros ayudarles a mantener la salud emocional, que sí importa.

Consultada la especialista sobre este tema, Ferrer comenta que la mejor recomendación que se le puede dar a los padres para proporcionar estabilidad emocional a sus hijos “es que en primer lugar mantengan una actitud positiva. Si los padres están estresados, preocupados o con ansiedad, sus hijos lo van a percibir. Antes de conversar con ellos deben buscar la manera de relajarse, encontrar un lugar y un momento tranquilo para conectarse con pensamientos positivos. Luego hablar con ellos, escucharlos, para que sepan cuáles son sus expectativas, emociones o dudas ante el regreso a clases”.

“Hablar con honestidad y naturalidad sin transmitirles sus propios temores. Tanto los padres como los maestros deben respetar los temores que sienta el estudiante para asistir a la escuela. Por lo tanto, permitirle continuar con su atención en línea hasta que se sienta seguro y confiado de regresar a la institución”, recomienda la psicopedagoga venezolana.

Foto Julia Cameron / Pexels

Agrega que “es importante promover espacios de diálogos con los estudiantes, de escucha y reflexión relacionados con las emociones y necesidades de cada alumno, con sus propias vivencias con el covid-19 durante el confinamiento, con el objeto de que los alumnos expongas sus dudas y emociones, que los docentes puedan identificar quiénes han sido los más afectados, para que reciban apoyo y les ofrezcan información clave para prevenir el contagio, transmitiéndoles seguridad y confianza, demostrándoles que los maestros y personal de la escuela estarán velando por su salud y bienestar”.

Estrategias para niños postpandemia

El regreso a clases nos pisa los talones. Consultamos a la especialista sobre estas estrategias que podemos aplicar para mejora la experiencia de estudio de nuestros niños y jóvenes.

Ferrer recuerda que cada niño tiene su manera particular de aprender. Algunos captan mejor el aprendizaje por el canal visual, otros son más auditivos y existen otro grupo más pequeño que percibe el aprendizaje a través de las sensaciones corporales o kinestésicas.

Por esta razón se recomienda utilizar diversas estrategias o técnicas que tomen en cuenta estos tres canales.

Betina Ferrer detalla que hay muchas técnicas o estrategias que los estudiantes pueden utilizar para estudiar, dependiendo del nivel o grado que estén cursando, menciona entre ellos:

1. Estudiar en voz alta

Repetir en voz alta lo que se está leyendo facilitará la memorización. También ayudará posteriormente a recordarlo.

Foto Rodnae / Pexels

2. Subrayado

Resaltar subrayando con distintos colores los puntos claves de un libro de texto o guía de estudio ayudará a los alumnos a seleccionar la información más relevante.

Pero antes de subrayarlos, para comprender la idea, deben leer el texto o información completa y posteriormente subrayar esos puntos claves que facilitarán el estudio.

3. Mapas mentales

Los mapas mentales son diagramas que el estudiante puede elaborar, estableciendo la idea central y de allí va extrayendo o anotando los puntos claves, resumiendo y organizando las ideas más importantes de un tema, señalando la relación que existe entre ellas.

4. Recursos auditivos

Utilizando el canal auditivo los niños pueden inventar canciones relacionadas con la materia o leer cantando el tema a estudiar.

También grabar leyendo en voz alta, para luego escuchar el audio grabado por ellos.

5. Recursos visuales o dibujos

Los alumnos que son más aprendices visuales lo hacen mejor cuando ven una imagen, y los que son kinestésicos se pueden ayudar recortando, pegando o realizando dibujos o maquetas, relacionados con el tema que está estudiando.

Foto Pixabay

Combinando estos dos canales de aprendizaje, el visual y el kinestésico (corporal), los niños se pueden apoyar usando estos recursos visuales, creativos y artísticos para aprender mejor y fijar lo estudiado.

6. Fichas de estudio

Es un método parecido al de toma de apuntes, pero los niños tomarán lo más importante de un tema y lo escribirán de manera más resumida en las fichas de estudio.

7. Flash Cards o tarjetas con doble cara

Los alumnos pueden elaborar con la ayuda de sus padres o maestros, bien sea recortando cartulinas del tamaño deseado o comprando tarjetas parecidas a las fichas de estudio, pero en blanco.

En esas tarjetas se escribirán por un lado, con un marcador o bolígrafo una pregunta referente a la materia y por el otro lado la respuesta.

Se puede hacer de manera más divertida utilizando un color de marcador o rotulador para cada materia, también colocado recortes o dibujos referentes a la respuesta en la otra cara de la tarjeta.

7. Enseñar lo aprendido a otras personas, simulando ser el profesor

Esta es otra manera de fijar lo aprendido. Después de estudiar, el alumno puede hacer una exposición del tema, explicándoselo a uno de sus padres o hermanos.

8. Reglas nemotécnicas

Estas técnicas facilitan el proceso de memorización, basándose en la asociación mental de conceptos.

El objetivo de las reglas mnemotécnicas no es interiorizar o comprender el contenido, sino memorizar datos. Son ideales para recordar fechas, lugares, nombres, etc.

9. Organizar el tiempo para estudiar

Es necesario cuando el alumno se disponga a estudiar que tenga espacios de descanso, haciendo pausas, ya sea cambiando de actividad, retomándola más tarde o para el día siguiente, en lugar de estar todo el día estudiando sin parar y sin dejarle espacio a la mente para relajarse.

FotoAmina Filkins / Pexels

Al retomar lo aprendido, después de haber descansado, podrá incluso memorizar el tema de forma más efectiva, con más interés y con más atención.

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