Venezuela

Maduro califica ayuda humanitaria como "migajas" y "comida podrida"

El gobernante de Venezuela, Nicolás Maduro, calificó este viernes de “migajas” y de “comida podrida” la ayuda humanitaria que envió Estados Unidos a solicitud del presidente encargado, Juan Guaidó, reconocido por 53 países como mandatario interino.

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Foto: AFP

“Es una trampa caza-bobos, hacen un show con comida podrida y contaminada», aseguró Maduro, en un acto en Ciudad Bolívar, en el sureste de Venezuela, al reiterar que Estados Unidos lo que busca es invadir militarmente a Venezuela.

El socialista culpó de la escasez de alimentos y medicinas que agobia al país a la supuesta “guerra de la oligarquía” y a sanciones de Estados Unidos, que congeló cuentas y activos venezolanos. Caracas cifra en 30.000 millones de dólares el daño a la economía.

“Ahora tienen el cuento de la ayuda humanitaria. Nos roban 30.000 millones de dólares y ofrecen cuatro migajas de una comida podrida”, reiteró Maduro.

Aseguró que su gobierno entrega a seis millones de familias cajas de alimentos a precios subsidiados, y que esta semana compró 933 toneladas de medicinas e insumos médicos a China, Cuba y Rusia. Muchos de estos alimentos han estado contaminados con insectos o que no tienen el valor nutricional adecuado. Además se han señalado que son importado con sobreprecio y su importación permite la malversación de fondos.

“Las pagamos con nuestro dinero porque no somos mendigos de nadie”, aseguró.

Curiosamente Maduro hace estos señalamientos luego que hablara de un supuesto bloqueo estadounidense, y que ese gobierno junto a países europeos y latinoamericanos -miembros del Grupo de Lima- estén entregando ayuda humanitaria a Venezuela.

Un cargamento de medicinas y alimentos está almacenado desde el 7 de febrero en Cúcuta, Colombia, en la frontera con Venezuela, cerca de un puente bloqueado por militares venezolanos con contenedores y una cisterna.

Guaidó asegura que esa asistencia ingresará a toda costa el 23 de febrero, cuando cumplirá un mes de asumir las competencias del Ejecutivo luego de que el Congreso -de mayoría opositora- declarara a Maduro usurpador al denunciar su reelección como fraudulenta.

Maduro, en sus acostumbrados señalamientos, acusó al opositor de 35 años de edad de ser “títere” del presidente Donald Trump y un “Judas” por pretender que el imperio estadounidense invada y ocupe militarmente el país y se “apodere” de las riquezas petroleras y el oro de Venezuela.

“Eso se llama traición a la patria (…) Lo peor es estimular la locura imperial de un gobierno extremista del Ku Kux Klan que está al frente de la Casa Blanca”, manifestó.

Delegados de Guaidó anunciaron el jueves en la sede de la OEA haber recaudado en las últimas tres semanas más de 100 millones de dólares en ayuda Venezuela, que vive una severa crisis que ha provocado el éxodo de más de 3 millones de venezolanos desde 2015, según la ONU.

Maduro en un intento desesperado por sobrevivir en el cargo reiteró que cree en el diálogo como “fórmula mágica” para resolver la crisis venezolana y dijo esperar la convocatoria a una negociación en virtud de gestiones de México, Uruguay y los países caribeños del Caricom, algo que ha sido descartado por la oposición e incluso por otras naciones que se oponen a Maduro y sus aliados.

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