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Mercado petrolero en clima de guerra fría

El poderoso ministro petrolero saudita Ali al-Naimi, le dijo al Canciller venezolano Rafael Ramírez, en un evento climático celebrado en la isla de Margarita hace un par de semanas que Arabia Saudita no iba a recortar por su cuenta la producción petrolera.

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Petróleo cinco

Fue un encuentro cordial no programado y después el ministro Ramírez siguió a cubrir la agenda internacional con otros productores de la Opep en Europa y Medio Oriente. Pero esa respuesta de al- Naimi fue un balde agua fría para los venezolanos.

La inesperada respuesta de Arabia Saudita se debe a que otros productores no cumplen estos acuerdos. Los sauditas en ocasiones más bien han intentado hacer descuentos de precios de los cargamentos enviados a sus clientes, dijeron fuentes cercanas a la delegación del principal productor y exportador de la Opep

Es probable que Kuwait y Emiratos Arabes Unidos sigan a los sauditas en la posición de no cortar producción y sólo apoyarán el recorte si están de acuerdo los 12 miembros del grupo.

El resultado de la reunión de la Opep del próximo 27 de noviembre es la incógnita, ya que los precios siguen su tendencia bajista fundamental, pese a los ligeros repuntes del miércoles y hoy jueves  20 de noviembre.

Muchos analistas prevén que esa fecha será determinante, pues si no hay un acuerdo para recortar la producción en unos 500.000 barriles diarios, como apuestan algunos analistas, la reputación del Grupo y su capacidad para intervenir en el mercado se verá deteriorada.

Si ese recorte luce insuficiente en una mercado con exceso de oferta y débil demanda, puede producir un repunte inmediato en los precios, pero en el mediano plazo prevalecerían los elementos fundamentales que explican la tendencia bajista del mercado.

El Brent que estaba en $109 en 2013, bajó a $104  en el promedio de lo que va de 2014. Se estima que para el 2015 esté en $84 dólares y en el 2016 en $90, según proyecciones de expertos como los del banco de  inversiones Goldman Sachs.

Hoy, el barril para entrega en enero se negociaba en $78,84, con un avance del 0,95% respecto al lunes, cuando a su vez detuvo una racha bajista de cuatro semanas.

Sauditas mantendrían su estrategia, porque tienen un músculo financiero para defender su mercado y lo respaldan en el Banco Mundial sus depósitos de $737.500 millones.

Todavía es un misterio el movimiento de los precios, y la guerra fría que lo envuelve, pero la Agencia Internacional de Energía (AIE) ha dicho que EEUU seguirá el ritmo de producción de 1 millón de barriles diarios, incluyendo el año 2015, que lógicamente baja los precios.

Si miembros de la Opep acuerdan recortar la producción para que suban los precios, entonces EEUU se beneficiaría y alentaría a los inversionistas para entrar en los proyectos estadounidenses de esquistos.

Está en juego si la OPEP y el grupo de algunos de los mayores productores de petróleo del mundo del Medio Oriente, todavía tienen peso para operar como un cártel mundial en medio de las luchas internas y la producción ampliada de otras fuentes, sobre todo de ese petróleo de esquisto de Estados Unidos.

El hecho de no lograr un acuerdo para un corte de producción colectiva, debilitaría su influencia de la Opep como grupo, para fijar los precios mundiales del petróleo, acción en la que han sido determinantes en las últimas cuatro décadas.

«La próxima reunión de la OPEP va a ser la más difícil durante este siglo», dijo Mohammad al-Sabban, un ex asesor del Sr. Naimi. Advirtió que “parece que la OPEP se ha olvidado de cómo cooperar.»

Dentro del grupo, a los funcionarios y técnicos del cartel les preocupa cada vez más sus divisiones internas que contribuyen a precios más débiles. «Si la OPEP no logra llegar a un acuerdo», dijo un funcionario de la OPEP, «los precios del petróleo van a seguir cayendo».

El grupo ahora bombea alrededor de medio millón de barriles diarios más que su objetivo de 30 millones de barriles diarios, según la Agencia Internacional de la Energía.

En conjunto, los países miembros de la OPEP aún producen más de un tercio del suministro de petróleo del mundo. Desde 1984, el cártel ha reducido la producción en 11 ocasiones para hacer frente a las caídas del precio del petróleo, de acuerdo con el Deutsche Bank. Estos recortes han promediado 1,24 millones de barriles por día.

Un informe del 14 de noviembre pasado de Goldman Sachs en su Portafolio Equity Research recopila un acuerdo casi unánime entre los analistas y los profesionales de la industria, de que los precios bajos estarán para quedarse por lo menos durante un año o dos.

David J. Kostin y sus colegas estiman que los precios del crudo Brent se mantendrán por debajo de $90  hasta el año 2016, lo cual es una buena noticia para muchos sectores de consumo y venta al por menor.

El informe de Goldman Sachs expone tres razones para que los precios del petróleo se mantengan bajos en el mediano plazo: el crecimiento de la producción fuera de la OPEP (2) el tamaño y el crecimiento continuo de los crudos de esquisto de Estados Unidos. (3) muchos sectores de consumo y venta al por menor se beneficiarán de los precios del petróleo más bajos.

El Congreso de Estados Unidos está a punto de derogar una ley que prohibía desde la década de los años 70, a las empresas petroleras estadounidenses, exportar y vender petróleo de sus campos domésticos, cuando sus pozos habían llegado al agotamiento y la extracción era de sólo 4,1 millones de barriles diarios.

Ahora está a punto de autorizar a las transnacionales petroleras estadounidense exporten el petróleo de esquisto, a través de Exxon, Chevron, ConocoPhillips, Occidental Petroleum y las firmas independientes, lo que sería un formidable espaldarazo a la perforación horizontal y el fracking hidráulica, anuncio el senador Joe Menéndez, de ascendencia cubana.

Menos agua para los procesos del fracking, lo cual permitirá a que China, que tiene muy poca agua, aceleré los desarrollos que le encargó a Shell de sus crudos de esquistos.

Los crudos ultralivianos de esquistos aportan de 15 a 20 por ciento más beneficios en el proceso de refinación, y así compensan su mayor costo de producción comparado con los crudos convencionales, porque de ellos se derivan productos de mejor calidad y mayor valor comercial.

Ya algunos expertos calculan que los desarrollos técnicos han bajado 30 dólares el costo del barril de ese petróleo de esquistos.

La refinería Hovensa, en Islas Vírgenes, propiedad de Venezuela y el grupo estadounidenses Hess Oil, a partes iguales, y que fue cerrada el año pasado, ya encontró comprador para reabrir la planta. Anunció una inversión de $1.000 millones para modernizar la planta de modo que permita procesar los crudos ultralivianos de esquistos, y exportarlos desde la isla al mercado internacional.

Mike Wittner, jefe de investigación de mercado del petróleo de Societe Generale dijo a un cuestionario de Bloomberg, “que en décadas no había visto un punto de inflexión de este tipo”.

“Si los sauditas hacen exactamente lo que están diciendo –dejar que el mercado se encargue de ordenar el exceso de producción, la Opep va a abdicar de su papel en el mercado”, dijo.

Agregó “que los sauditas apuestan a que los precios más bajos obligarán a algunos productores estadounidenses a salir del mercado, por operaciones no rentables de los nuevos crudos.

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