Venezuela

Muerte en las carreteras venezolanas: cuando el hampa domina las vías

El béisbol venezolano sufrió dos bajas sensibles con las muertes de Luis Valbuena y José Castillo, de Cardenales de Lara, víctimas en un accidente de tránsito que está siendo investigado por las autoridades y que apunta a la intervención de bandas delictivas que operan en las carreteras del país.

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Fotografía: Archivo

Mientras el deporte llora, en el país crecen las críticas sobre cómo la falta de correctivos ha permitido expandirse a las células violentas.

Javier Ignacio Mayorca, periodista especialista en criminalística, consideró que son “múltiples factores los que hacen a una vía insegura”; no obstante, se enfocó en tres puntos comunes al momento de hacer el análisis: el chofer, el vehículo y la vía. Pero en el caso de Venezuela se suma un nuevo elemento conocido como “factores asociados a la criminalidad”.

Este elemento delictivo hace recordar el caso de Mónica Spear, Miss Venezuela 2004, quien fue asesinada junto a su pareja el 6 de enero de 2014. Ese día, ya entrada la noche, transitaban a bordo de un vehículo marca Toyota en sentido a Valencia cuando se accidentaron luego de que irregularidades en el camino impactaran contra los neumáticos. Mientras eran atendidos, un grupo de antisociales salió de los alrededores para someterlos. La reacción de Spears, su pareja y su hija fue encerrarse en el carro, donde murieron, salvo la niña, al ser atacados por los victimarios.

En ambos hechos los protagonistas de acabar con la vida de estas personas llevan el mote de piratas de carretera, dijo Mayorca, al actuar bajo una forma similar. Esto está ocurriendo en la mayoría de las vías que conectan a distintos estados del país, donde “colocan objetos o aceite (…) estamos hablando de una situación con una altísima peligrosidad que se va a incrementar ahora en diciembre”.

La particularidad en la muerte de Valbuena y Castillo ronda en la decisión de los peloteros de unirse a su compañero Carlos Rivero, propietario del vehículo siniestrado, en viajar aparte del equipo.

Con la misión de evitar casos para lamentar, la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP) confirmó en la rueda de prensa que sirvió como presentación de la campaña 2018-2019 que cada equipo del circuito contaría con una patrulla y cuatro efectivos encargado de escoltar el autobús que transporta a jugadores y cuerpo técnico a cada escenario donde se celebra el deporte.

Sin embargo, estos tres decidieron aventurarse guiados por el chofer particular del tercera base de los alados, quien resultó herido.

“Algunas veces lo hacen”, aseguró Jesús Perdomo, jefe del servicio de seguridad que escolta a los crepusculares, quien detalló que el grupo se encontraba desempeñando sus labores cuando el lamentable suceso ocurrió. El efectivo calculó que Cardenales iba a la altura de Morón, estado Carabobo, a una hora aproximadamente de la carretera Cimarrón Andresote, lugar del vuelco.

“Si no conoces la vía no la puedes recorrer ni de noche ni de día”, advirtió Mayorca, quien trajo a la mesa el caso de equipos del fútbol nacional como Trujillanos y Angostura, cuadros que en 2016 y 2018 fueron interceptados por delincuentes que los despojaron de sus pertenencias, secuestrando incluso por alrededor de tres horas a los andinos.

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