Wilder Manyavilca y su esposa, Dunia Bustíos, fueron atacados criminalmente en una zona agreste de selva montañosa por donde se desplazan remanentes del grupo terrorista Sendero Luminoso en alianza con los carteles del narcotráfico. Esto ocurre apenas 100 días después de que Pedro Castillo asumiera la presidencia
El alcalde de la provincia de La Mar, en Ayacucho al sur de Perú, y su esposa, murieron luego de que el auto en el que viajaba por una zona rural fuera atacado con armas de fuego por desconocidos.
Wilder Manyavilca y su esposa, Dunia Bustíos, fueron impactados por varios disparos en el Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), una zona agreste de selva montañosa por donde se desplazan remanentes del grupo terrorista Sendero Luminoso en alianza con los carteles del narcotráfico, según las autoridades.
Medios locales señalaron que Mayavilca se dirigía este viernes 12 de noviembre, acompañado de su esposa, un funcionario y un chofer, a colocar la primera piedra de un local comunitario. En eso fue emboscado por otra camioneta a la altura del paraje río Herjemayo, del centro poblado Las Palmas.
Los pasajeros de ese vehículo dispararon ráfagas de armas de fuego que dejaron gravemente herido a Mayavilca. El alcalde murió cuando era trasladado al hospital de la localidad de San Francisco.
Su esposa también recibió varios impactos de bala. Falleció cuando era operada de urgencia.
Al respecto, el presidente de Perú, Pedro Castillo, condenó este atentado y lo calificó de «repudiable», tras lo cual afirmó que debe ser «investigado y sancionado de manera inmediata».
«Mis profundas condolencias a sus familiares y a su pueblo», expresó en referencia al alcalde. Según dijo, «asumió el compromiso con la elección unánime de su pueblo. Y hoy cayó por haber enfrentado este flagelo tan triste con todos los recursos disponibles (s.i.c.)».
Castillo reiteró que giró instrucciones «claras y precisas» para que se «despliegue todo el personal necesario». También para que se haga una «exhaustiva investigación de manera inmediata y rápida que devuelva la tranquilidad a la familia y a los vecinos».
«En nuestro Gobierno ningún acto criminal quedará impune», dijo. El tiempo dirá si esto es cierto o son solo palabras vacías.
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