El coordinador político nacional del partido Voluntad Popular, Carlos Vechhio, pidió este martes al nuevo secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, que "no dé la espalda" a la crisis política en Venezuela.
«El verá cómo quiere pasar a la historia, si como la persona que dio la espalda a los derechos humanos y a la democracia o como la persona que supo rescatar la convivencia democrática en Venezuela», dijo Vechhio en declaraciones en Washington.
El opositor, que vive en Florida (EEUU) y sobre el que pesa una orden de detención, participó este martes junto a un reducido grupo de venezolanos que residen en el área de Washington en una protesta frente a la sede de la OEA, que celebra entre ayer y hoy su Asamblea General, la reunión de los titulares de Exteriores de los 34 países miembros activos.
«Ayer Almagro dijo que no va a tener dobles estándares en democracia y derechos humanos, ahora debe pasar del discurso a la acción, él no está para defender Gobiernos sino para servir a los pueblos», consideró Vechhio.
El opositor venezolano también pidió a Almagro que no sólo busque la reintegración de Cuba en la OEA, tras el levantamiento de su suspensión en 2009, sino que promueva «la democratización»de la isla.
Los manifestantes que hoy se congregaron por segundo día consecutivo frente a la sede del organismo continental lo hicieron al grito de «OEA, haga su tarea», una labor que -a su juicio- pasa por pedir «la liberación de los presos políticos, la convocatoria de las elecciones previstas para este año y el cese de la represión en Venezuela».
Voluntad Popular es el partido del dirigente opositor encarcelado Leopoldo López, en huelga de hambre para reclamar la liberación de los opositores presos y que se ponga fecha a las elecciones parlamentarias que Venezuela debe celebrar este año, ya que el nuevo Parlamento debe tomar posesión el 5 de enero de 2016.
Almagro ofreció el 10 de junio una misión de observación electoral de la OEA para esos comicios, tras la negativa de Caracas ante la misma oferta en las elecciones presidenciales de 2013.
El nuevo secretario general recibió el pasado domingo peticiones de aplicar la Carta Democrática a Venezuela durante su primer encuentro con representantes de la sociedad civil del continente.
La Carta Democrática Interamericana, aprobada en 2001 por la Asamblea General de la OEA en Perú, establece que la ruptura del orden democrático o su alteración en un Estado miembro constituye «un obstáculo insuperable» para la participación de su Gobierno en las diversas instancias del organismo.
Ése es el instrumento que se invocó para suspender a Honduras de la OEA durante casi dos años tras el golpe de Estado de 2009.
La crisis política en Venezuela es el primer desafío al que tendrá que enfrentarse Almagro, que tomó posesión el 26 de mayo y que cuenta con el aval de las buenas relaciones que fraguó en el continente como canciller del expresidente uruguayo José Mújica, cargo desde el que participó el año pasado en una misión de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para mediar en Venezuela.
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