¿Qué hacer en Caracas en Carnavales?

Pareciese imposible, pero aún hay mucho que hacer en esta ciudad durante las festividades carnestolendas, empezando por el casco histórico, una buena opción alejada de las olas.

Lleno de edificios coloniales y monumentos a los libertadores, el centro es sin duda un lugar lleno de secretos y ofertas para quienes ansían algo de entretenimiento en estas fechas.

Para conocer la Caracas de la época de antaño, en el Concejo Municipal, ubicado frente a la Plaza Bolívar, se pueden encontrar unas hermosas maquetas con detalle y minuciosidad de primera calidad.

En ella se observan los edificios emblemáticos y aquellos que el progreso demolió para dar paso al modernismo actual. Además hay varias pinturas de destacados artistas, esculturas que resaltan la idiosincrasia del venezolano que a pesar de los años sigue vigente. El tour se hace sin ningún costo.

En la emblemática plaza existen otros puntos turísticos que no tienen costo alguno. La visita guiada por el Palacio Federal Legislativo es imperdible, los días martes y jueves son los permitidos para mostrar los históricos pasillos, el salón elíptico y el hemiciclo protocolar donde los diputados y constituyentes discuten los temas del país.

Muy cerca, Libertador Bistró, un lujoso café ubicado en una de las esquinas de la plaza, muestra un ambiente exquisito y menú sin igual. Un café pequeño costaba Bs 87.000 el martes 6 de febrero, precio que puede cambiar en tan sólo unos días dado los altos índices inflacionarios.

El gobierno instaló más de 50 cámaras de seguridad en distintas esquinas, en las que además hay presencia policial.

La Plaza Bolívar es un excelente lugar para tomar fotografías y donde las ardillas siguen siendo parte del espectáculo.

Subiendo por la catedral de Caracas hay una vieja moto Vespa verde. Esa es la señal de Artesanos Café, el sitio donde podrás sentarte a comer un dulce o un café, o ambas. A primera vista parece un local pequeño, pero no lo es. Cuenta con una larga barra y más de siete mesas en donde se puede degustar uno de sus exquisitos sánduches vegetarianos por Bs 87.000, o una galleta de avena a Bs 21.000. Para los más dulceros los golfeados son la opción perfecta y a un precio de Bs 51.000.

Una alternativa lo es también el Parque Ezequiel Zamora o El Calvario, que pondrá al visitante en contacto con la naturaleza y dará una vista privilegiada de la ciudad. El Calvario es un pulmón natural con caminerías al estilo francés, permitiendo la ejercitación del cuerpo pues para llegar hasta ese lugar hay que subir los 90 escalones hasta el primer nivel y luego otros que llevan hasta el monumento a Bolívar, rodeado por parques infantiles y una glorieta.

Este sitio está resguardado por diversos cuerpos de seguridad, inclusive hay un puesto de la Guardia Nacional Bolivariana. Una vez allí es menester visitar el Arco de la Federación y la Iglesia de Nuestra Señora de Lourdes. Desde el mirador se pueden tomar unas increíbles fotografías con el Ávila de fondo.

Al bajar del parque hay dos opciones para el siguiente punto. Una es caminar, tomar sol y ver el movimiento de la ciudad por toda la avenida Universidad y parte de la avenida México hasta la Galería de Arte Nacional. Sin  embargo, la segunda opción es tomar el Metro de Caracas, cuyo costo es de Bs 4.

En el museo se encuentran obras icónicas como Miranda en La Carraca, de Arturo Michelena y La muerte de  Ricaurte en San Mateo de Antonio Herrera Toro.

En el pasillo de galería hay un pequeño café de sillas metálicas con un menú escrito sobre pizarra. Cada platillo lleva un nombre artístico y precios que le darán respiro al bolsillo.

Al salir, en uno de los pasillos adyacentes hay un grupo de artesanos que vende suvenires. Uno de estos es un monedero hecho con carcasas de viejos casetes de música, bordado con estambre a un módico precio Bs 20.000, que puede servir para guardar tarjetas, billetes y cosas pequeñas.

El recorrido no termina ahí. Hay tres puntos básicos para continuar estos carnavales caraqueños. Los tres museos emblemáticos de la ciudad no pueden escapar del recorrido. El de Arte Contemporáneo se encuentra en estos momentos exhibiendo las obras de la bienal del sur hasta el último de febrero.

Por otra parte, en el Museo de Ciencias Naturales los niños pueden descubrir un mundo del reino animal que ven en las famosas películas de Disney, como el de las jirafas, el oso polar y el gran león.

Los adultos revivirán épocas de juventud en la sección tecnológica, en la que observarán la evolución de los celulares.

Junto a este museo está el de Bellas Artes, hay un conjunto de salas con un jardín central que exhibe un espectacular estanque que refleja el cielo caraqueño y en el que sentarse a leer es un perfecto deleite. Además tiene obras al aire libre que se mueven con el viento.

En el medio de estos dos lugares hay otro espacio recreativo. Se trata del parque Los Caobos, cubierto por árboles y esculturas, que cuenta con una fuente de agua, conformada por cuatro estatuas que representan las distintas regiones del país. En ella los niños juegan y se dan chapuzones. También se pueden tomar fotografías con la atracción más reciente, una escultura de un elefante dorado inaugurada en 2014.

Para los que gustan de las alturas y la vista panorámica de Caracas está el Metro Cable de San Agustín, de fácil acceso y a un costo de Bs 4. Ubicado cerca de Parque Central, es una opción viable. Es un trayecto de unos 15 o 20 minutos por tres estaciones, sin embargo la tercera estación está en remodelación. Es una experiencia diferente que pone el contraste con la otra cara de la metrópolis.

Es recomendable ir en horas más concurridas.

Existen otros lugares interesantes en Caracas. Subiendo por la estación del Metro de Los Dos Caminos se llega al Centro de Arte Los Galpones. La entrada es gratuita en este exquisito lugar, donde hay modernas obras de arte, tiendas de ropa de diseñador y una hermosa librería en la que la luz natural inunda sus pasillos. Los libros puede leerse. Hay una enorme variedad, pero sus precios son elevados si se quiere comprar alguno.

Desde la estación Los Dos Caminos del Metro de Caracas se va a la de Altamira. A unos metros de allí se encuentra el centro cultural La Estancia, un espacio verde en medio de los altos edificios del municipio Chacao. Cuenta con una treintena de estatuas de animales hechas con chatarra: serpientes, monos e iguanas. Se puede descansar en la grama y llevar a los niños para que corran un rato.

Saliendo del sitio, a unos pocos pasos de la puerta de entrada hay un puesto de perros calientes, donde una hamburguesa tiene un precio de Bs 90.000. Es una buena opción, pero la fama de este artista de la comida callejera es notoria y las colas que se forman son largas.

Para la noche se puede hacer un cierre de oro, pero si en el día el gasto fue ínfimo. En el espacio Trasnocho Cultural, ubicado en Las Mercedes, se puede apreciar una obra de teatro Bs 65.000. Además, en los pasillos del centro comercial se ubican una galería de arte y la librería El Buscón.

Caracas sigue siendo una metrópolis bulliciosa con ofertas interesantes. Muchas exceden el presupuesto deseado, otras siempre han estado a la vista del ciudadano, pero la inseguridad y los temores a recorrer sus calles apartan a los visitantes.

Sin embargo, estos carnavales con un presupuesto limitado es la oportunidad perfecta para redescubrir la capital, sólo necesitas tus pies, ropa cómoda y muchas ganas de disfrutar.