“Que se vayan todos”, dice María Corina sobre demandas del 19 de abril

“La gente está muy clara con lo que hay que hacer para resolver el drama venezolano y para salir de este hueco, del abismo”, dijo la dirigente política, criticada por otros políticos opositores por su posición frontal contra el chavismo y el gobierno de Nicolás Maduro.

“Hace mucho tiempo esto aquí dejó de ser por cambiar a magistrados o gobernadores. Sí, todo eso también, pero lo que hay que cambiar es el régimen, ya no es ni siquiera a Maduro”, dijo en breve diálogo con El Estímulo, horas antes de la manifestación opositora que se propone sacar a la calle a miles de venezolanos este miércoles 19A.

“Es que hay que cambiar el régimen, ya ni siquiera a Maduro, es el régimen, que pretende quedarse incluso si se va Maduro. Y los venezolanos estamos claros en que este momento histórico no lo podemos y no lo vamos a dejar pasar”, afirmó.

En Caracas la movilización se concentrará en 26 puntos de salida, de este a oeste y sur a norte. Los dirigentes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la coalición opositora formada por una veintena de variopintos partidos, enfrenta el desafío de recuperar la calle con una gran movilización, que esperan sea más contundente que la del 1° de septiembre de 2016.

Después de esa gran toma de Caracas, un sector de la oposición decidió sentarse a dialogar con el gobierno de Maduro, con la intermediación del Vaticano y de varios expresidentes de Iberoamérica.

Después los opositores se quejaron de que el gobierno no cumplió con acuerdos supuestamente alcanzados en la mesa de negociaciones y el dialogo naufragó.

Encuestas de opinión y analistas políticos afirman que el supuesto diálogo solo fortaleció y radicalizó a Maduro, desmovilizó a la oposición, le bajó presión a las protestas callejeras y resquebrajó a la MUD, una frágil alianza electoral que logra cohesionarse en tiempos de comicios, pero que en su interior es un “desfile de egos” e intereses personales de algunos dirigentes.

Pero Machado considera que en estos meses la radicalización del chavismo ha servido para mostrar el verdadero talante del régimen y terminó cohesionado otra vez a la oposición.

“Todos los venezolanos sabemos lo que significa el 19 de abril, es libertad, así es la historia”, dijo sobre la emblemática fecha escogida para esta marcha.

“Fíjate cómo han confluido en un momento todas las fuerzas que durante tantos años hemos estado construyendo. Es el momento histórico más importante desde 1810”, afirma.

Argumenta que desde una perspectiva histórica ya no se trata nada más de la democracia.

“La democracia dejo de existir en Venezuela desde hace mucho tiempo. En este momento se trata de restaurar la República. La República tiene dos dimensiones indisolubles de la soberanía, la nacional y la popular”, explica.

La soberanía popular, dice, se expresó el 6 de diciembre, cuando el pueblo de Venezuela “sacó al gobierno”.

“Esa vía electoral ya fue. Ahora corresponde el desmontaje del régimen”, dijo sobre las elecciones legislativas que le dieron una abrumadora mayoría a la oposición en la Asamblea Nacional.

Según analistas, esa mayoría fue socavada por maniobras judiciales del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), también controlado por el chavismo, de modo que el Parlamento fue técnicamente anulado y Maduro hoy gobierna bajo estado de excepción.

Sobre la soberanía nacional, Machado sostiene que ésta ha sido ultrajada.

“En Venezuela hoy no mandan venezolanos. Frente a eso cuando tú tienes una sociedad institucionalmente en disolución no hay otra que restaurar la República. Por eso éste es el momento más importante desde que Venezuela nació”, dijo Machado.

Según su análisis, el momento actual es positivo y proclive a cambios trascendentales porque en los últimos meses de lucha opositora, desde septiembre para acá, se han producido cambios muy relevantes dentro y fuera del país y dentro y fuera del chavismo, del régimen.

Esto, dice, “hace que sea mucho más urgente y mucho más factible y más posible la salida” del régimen chavista.

Entre esos cambios enumera el evidente resquebrajamiento de la unidad del gobierno.

“Esto tiene mucho que ver con la forma como se desnudó frente al mundo la naturaleza criminal del régimen en cuanto a vínculos con narcotráfico, legitimación de capitales, contrabando de cuanta porquería se te ocurre, e incluso vínculos con el terrorismo islámico”, dijo respecto a las denuncias frecuentes dentro y fuera del país sobre supuestos vínculos de personeros del chavismo con actividades ilícitas.

Sobre la disposición de la gente a protestar, Machado señala que lleva muchos años en la calle.

“Y la energía que hoy hay es inédita. Veo una determinación serena. El país es una sociedad unida, entendemos que hoy no vamos a retroceder y el objetivo es claro: que Maduro y el régimen se tienen que ir. Esto es una convicción, no es una consigna”, afirma.

Sobre la falta de unidad de propósitos en otras convocatorias opositoras a protestar, afirma que “lo estelar, lo formidable es que finalmente como sociedad hemos entendido esto no como una lucha política electoral, sino existencial”.

“Y finalmente el mundo así lo entendió. Creo que la radicalización de los últimos días de exabruptos es una señal de debilidad. Peligrosa, inaceptable, patética, pero una señal de debilidad”, dijo en alusión a un acto oficial de Maduro realizado el lunes con milicianos civiles y contactos vía satélite con generales que comandan zonas estratégicas en las regiones del país, los cuales manifestaron su fidelidad al presidente, al socialismo y al chavismo.

“Maduro habló todo el tiempo de traición y no de felicidad. Es muy revelador”, recalcó.

Señaló que de forma paradójica otro exabrupto jurídico, en este caso del TSJ cohesionó a la oposición.

“Logró lo que tanto esperábamos, que se alinearan todas las fuerzas de afuera y de adentro… Los que todavía afuera le daban algún beneficio de la duda a Maduro ahora dijeron ‘hasta aquí’”, dijo sobre las sentencias del TSJ que anularon la inmunidad de los diputados y las funciones de la Asamblea Nacional.

En realidad esas sentencias solo fueron un puntillazo final, pues el Parlamento ya había sido aniquilado con más de 50 acciones y sentencias en su contra. Sus funciones además han sido diezmadas, pues el chavismo ni siquiera le rinde cuentas del ejercicio ejecutivo.

“Quienes en Venezuela decían: ‘bueno si nos dan las gobernaciones nos quedamos tranquilos’ entendieron que no es suficiente y que el país no se la va a calar…. Así que estas acciones terminaron socavando al régimen por dentro y fortaleciéndonos por fuera”, insistió.

Machado cree que después del esperado derrumbe definitivo del chavismo, la transición va a ser a ser “la más demandante, retadora y compleja que ha habido en la historia”, por la crisis humanitaria, la económica, por el narcotráfico y “el pacto de mafias” en el poder.

Los venezolanos, dijo, sienten que es necesario un nuevo pacto social republicano con tres grandes pilares:

– Primero, la unión de la sociedad, “de todos aquellos que tenemos distintas posiciones pero coincidimos con una visión de Venezuela republicana y democrática y que necesitamos un proyecto común».

– El segundo punto es la justicia. “Necesitamos restituir la ley y el orden. No es viable una sociedad sin estado de derecho”.

– El tercer punto de su propuesta es la libertad, “a los efectos de fomentar la prosperidad y el emprendimiento”, con una economía abierta.

“La Venezuela dependiente del populismo y el rentismo se acabó. Esos tres pilares son un pegamento que nos dice que es para allá y esta es la guía, más allá de las posiciones de los líderes políticos”, insiste.

Machado recalca la importancia de la libertad individual.

“Muchas veces se habla de la sociedad como masas, pero el centro es el individuo con su dignidad y libertad. Solo así construimos una sociedad que pueda dejar atrás la dependencia y el populismo. En una sola generación podemos dejar atrás el rentismo, el clientelismo, el populismo, el estatismo, el centralismo y el militarismo”, afirmó.