Tras pasar un mal rato en el primer set, Federer, de 37 años, se impuso a su contrincante por 3-6, 6-1, 6-2 y 6-2.
«Me costó bastante al principio, tenía las piernas como heladas», admitió, reconociendo que «todo pasó muy rápido» en la primera manga, Harris «jugó muy bien y me puso nervioso».
«Después logré entrar en el partido y eso me llevó adelante», agregó.
Tras su reciente victoria en el torneo alemán de Halle, que también se juega sobre hierba, aspira a conquistar su noveno título en Wimbledon, para lo que sin embargo tendrá que ganar cinco partidos antes de un eventual enfrentamiento en la final con el número uno y vigente campeón Novak Djokovic.
En la rama femenina, la hispano-venezolana Garbiñe Muguruza, ganadora en 2017, fue eliminada este martes en la primera ronda de la presente edición, al caer frente a la brasileña Beatriz Haddad Maia por un doble 6-4.
«Es un día duro. Es un poco triste estar fuera de Wimbledon, que es un torneo muy especial», declaró en la rueda de prensa post-partido.
Muguruza, 26ª favorita en el Grand Slam inglés, fue además finalista en 2015 y ganadora de Roland Garros en 2016. No perdía en su debut en Wimbledon desde 2014. Su rival, Haddad Maia, procede de la fase previa del torneo.