Venezuela

Seguimiento, vigilancia e invasión: los secretos del Sebin

El medio argentino Clarín reveló documentos obtenidos desde las entrañas de la policía política del chavismo, el Sebin, organismo creado como servicio de inteligencia y que hoy, luego de la salida del país de su exdirector, Manuel Cristopher Figuera, pasó a ser una carta con más grietas que regularidad dentro de la maquinaria comandada por Nicolás Maduro.

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Fotografía: AFP

La dinámica del cuerpo del Estado es sencilla: seguir a sus objetivos, infiltrarse en la oposición y coordinar movimientos que lleven a ojos externos a posarse sobre falsas regularidades en el sistema electoral. Así lo explica el artículo de Nicolás Wiñazki, quien dio detalles de papeles obtenidos y que están ligados al proceso electoral de 2012, últimas elecciones presidenciales del fallecido Hugo Chávez, así como otra serie de situaciones cuyo norte fue conocer cada movimiento de la oposición venezolana.

Uno de los documentos mostrados detalla la irregularidad en su misión por llevar a una comisión de veedores a diez centros electorales del estado Lara, los cuales, según disposición y conveniencia del chavismo, predominaba el voto rojo. Cada una de estar personas que conformaba el grupo fue seguida desde que inició su andar por el territorio nacional.

Además de estos, Clarín informó que figuras de la oposición venezolana, como Henrique Capriles, candidato presidencial en aquellos comicios, junto a otros elementos adversos al gobierno de Maduro que hoy hacen sus labores desde el exterior, tenían asignados a funcionarios que terminaron siendo la sombra de ellos, especialmente durante la campaña de 2012.

Infiltrar elementos en la oposición también es parte del manual del Sebin. En su artículo, Wiñazki explicó el caso de un estudiante de la Universidad Católica Andrés Bello, el cual fue analizado previamente por el cuerpo de seguridad y que fue reclutado para operar en condición de “patriota cooperante” en el centro estudiantil a cambio del pago de su matrícula.

Políticos, periodistas, civiles, observadores extranjeros. Para el Sebin no existe la discriminación. Todo aquel que diera la espalda al gobierno de Chávez, y que lo haga en el presente al de Maduro, es objetivo de persecución.

Para leer el trabajo completo de Clarín, haga click aquí.

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