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Senador de EEUU Menéndez plantea internacionalizar sanciones contra Maduro

El senador estadounidense Bob Menéndez, del Partido Demócrata, propuso este miércoles en Bogotá que se internacionalicen las sanciones contra Nicolás Maduro, de quien dijo que no está legítimamente comprometido con una negociación para solucionar la crisis venezolana.

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Senadores líderes de EEUU opuestos al petróleo venezolano
Fotografía: Getty Images

«Tenemos que internacionalizar las sanciones, yo he tenido conversaciones con mis colegas parlamentarios de Europa y de otras partes. Queremos, quisiéramos, realizar una transición pacífica en Venezuela, queremos llegar a una solución diplomática», manifestó Menéndez en un encuentro con periodistas en la capital colombiana.

El legislador visitará mañana Cúcuta, el principal paso limítrofe entre Colombia y Venezuela, países que tienen una frontera común de 2.219 kilómetros, para ver de cerca la crisis migratoria.

En ese sentido dijo que sugirió al secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, y al administrador de la Agencia para Desarrollo Internacional (USAID), Mark Green, convocar a una conferencia de donantes para hacer frente a la crisis migratoria de Venezuela.

«La verdad es que no entiendo bien por qué la Administración del presidente Donald Trump no ha convocado a esos grupos de donantes. Quizás Europa dice que esto es un problema de los americanos, pero si Europa quiere participar en el proceso de llegar a una negociación o acuerdo de paz y quiere considerar si sanciona o no tiene que ser parte también del apoyo», explicó.

El congresista estadounidense, miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo también que se debe procurar que China y Rusia entiendan que si quieren que Venezuela les pague sus deudas debe haber un Gobierno elegido democráticamente y no una continuación de Maduro.

«No van a ser realizados los pagos en una continuación de Maduro; al contrario tienen que ser realizados en un Gobierno democráticamente elegido que pudiera comprometerse en las obligaciones de cualquiera de las inversiones legítimas que se hicieron en Venezuela», subrayó.

Por ello, Menéndez cree que parte de lo que mantiene a Maduro en el poder son los cubanos, a quienes responsabilizó de la muerte del capitán de la Armada Rafael Acosta Arévalo, ocurrida la semana pasada cuando se encontraba detenido por el Gobierno.

La muerte del capitán de corbeta Acosta, al parecer víctima de torturas, provocó denuncias contra el Gobierno de Maduro, que el sábado pasado pidió una investigación sobre lo sucedido con el militar.

El lunes, la justicia venezolana anunció la detención de dos militares, ambos pertenecientes a la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada), por su presunta responsabilidad en la muerte del capitán y les acusó de homicidio preterintencional.

Por otra parte, Menéndez aseguró que debe haber una estrategia mucho más amplia y concentrada para enfrentar la crisis venezolana, pues considera que las dictaduras no se cambian en poco tiempo y quien piense eso está equivocado, por lo cual valoró el trabajo de los países de América Latina en ese proceso.

«Nunca he visto una Latinoamérica más unida. El Grupo de Lima tomó las posiciones que ha tomado con referencia a Venezuela y eso es un acontecimiento muy significativo», añadió.

El senador también resaltó la enorme importancia que tiene la crisis venezolana no solo para su país y para Colombia, por su vecindad, sino para toda América Latina.

«Lo que pasa en Venezuela va a decidir en gran parte hacia dónde vamos en los años que se aproximan en el resto del hemisferio. La crisis humanitaria es enorme, más y más venezolanos huyen todos los días y si no hay un cambio vamos a ver un flujo de refugiados que va a ser similar a la situación de Siria», destacó.

Según cifras de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Agencia de Refugiados de las Naciones Unidas (ACNUR), el número de venezolanos que han abandonado su país supera la barrera de los cuatro millones.

Actualmente, Colombia acoge a más de 1,3 millones de ellos, seguido de Perú, con 768.100; Chile (288.200); Ecuador (263.000); Brasil (168.300) y Argentina (130.000).

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