A pesar de haberlo visto en múltiples ocasiones, muchos no saben de dónde viene esta curiosa moda. En la década de los 50, la ropa sport fue tomando protagonismo gracias a la figura de James Dean, quien popularizó el estilo «casual sport» convirtiéndose en un patrón aceptable por la sociedad de la época. Años después, en la década de los 90 y 2000 esta tendencia vuelve a aparecer dentro de los grupos geek (cuando ser geek no era cool, por supuesto) y se le relacionó con los chicos nerds. Por ello, la mayoría del público masculino mantuvo una perspectiva negativa sobre este estilo y eran muy pocos quienes tenían el coraje de llevarlo.
Hoy día con la llegada de la moda vintage y heritage, (y siguiendo el eterno mantra de que en la «moda todo vuelve») se retomaron aquellas costumbres que tus abuelos, tus papás y tus tíos utilizaban en sus años mozos, y una vez más es «aceptable» usar toda la camisa abrochada. Para ello debes tomar en cuenta que el cuello sea fino, que tenga una talla justa, es decir, ni tan ajustado, ni tan holgado para que no vayas a morir asfixiado en el nombre del buen gusto.
Acá te dejamos 2 looks en los que te puedes inspirar para la próxima vez que asistas a una fiesta o lleves a tu novia a comer en un restaurant caché:
