Viciosidades

'Gummi Ben', el comentarista "loco" de la TV islandesa

Sus gritos durante la transmisión de la Eurocopa 2016 lo hicieron famoso y popular: Gudmundur Benediktsson una vez más pondrá su voz durante el Mundial 2018, el primero de la historia para los vikingos, que debutan el sábado ante la Argentina de Leo Messi en Moscú por el Grupo D

TEXTO: AFP | FOTOGRAFÍA: @GUMMIBEN VÍA TWITTER.
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Usualmente tranquilo, a Gudmundur Benediktsson, apodado ‘Gummi Ben’ en la isla boreal, se le «salió la cadena» hace dos años en Francia, donde construyó su popularidad internacional gritando a lo loco los triunfos vikingos.

Todo arrancó el 22 de junio de 2016: Islandia acababa de anotar su segundo gol frente a Austria en tiempo de descuento de la última fecha de su grupo para imponerse 2-1 y sellar in extremis su boleto a octavos de final.

 Los gritos de «Gummi Ben» 

«Creo que no hacía más que reflejar lo que los islandeses sentían en ese momento», recuerda.

Unos días después, el acto volvió a repetirse cuando la selección islandesa derrotó a Inglaterra (2-1) y logró una histórica clasificación a cuartos de final. En semis, Francia puso fin al cuento de hadas (2-5).

«Era nuestra primera visita a una competición como tal y fue sabrosa, algo con lo que siempre habíamos soñado».

Dos años después de aquella epopeya, Islandia está nuevamente entre los grandes, esta vez para disputar la Copa del Mundo.

Al terminar primera de su grupo en las eliminatorias, por delante de Croacia, Ucrania y Turquía, la isla volcánica con unos 350.000 habitantes se convirtió en la nación más pequeña en clasificarse a una fase final de Copa del Mundo de toda la historia.

Como en la Eurocopa, ‘Gummi Ben’ será la voz de Islandia en la cadena RÚV, la televisión pública.

El grupo de medios 365 para el que trabaja usualmente una vez más le dio autorización para que pueda desparramar su talento durante la competición.

Los «Strákarnir okkar» (nuestros chicos) debutan el sábado contra Argentina. Y Gudmundur Benediktsson tiene un cosquilleo en el estómago.

«Jugamos contra Messi, tal vez el mejor jugador de la historia del fútbol, por lo que estoy realmente impaciente y al mismo tiempo ansioso», reconoció el exvolante de 43 años.

 El deporte, una pasión familiar 

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Desde hace cerca de 15 años comenta la Premier League inglesa, la Liga española, la Champions y la Pepsideild, el campeonato nacional islandés.

«En esas competiciones, uno puede hablar y comentar de forma más tranquila, pero cuando está la selección nacional, al diablo la neutralidad y la objetividad», reconoce.

Originario de Akureyri, al norte del país, Gudmundur Benediktsson disputó diez partidos con la selección en los años noventa. Fue tres veces campeón de Islandia, antes de comenzar su carrera de entrenador. Su esposa Kristbjörg Ingadóttir ha tenido un recorrido similar.

Y como el fútbol es un asunto de familia, su hijo Albert juega en el PSV Eindhoven holandés.

Con un bonito futuro como promesa, lleva el mismo nombre que su tatarabuelo, Albert Gudmundsson, pionero del fútbol islandés en el siglo XX y quien tiene su propia estatua delante de la sede de la Federación.

El joven talento acaba de festejar sus 21 años y es la sorpresa de la lista de 23 en Rusia. Por eso las emociones son aún más fuertes para su padre.

«Eso podría ponerle claramente más pimienta a las cosas», dijo el relator.

 Primer Mundial 

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Para «Gummi» este Mundial también marcará su estreno como comentarista. «Argentina-Islandia es un lindo debut». Luego tendrá que comentar los partidos ante Nigeria y Croacia, por el Grupo D.

«Los nervios son buenos si uno los usa correctamente», analiza el exayudante de campo del KR Reykjavik. «Pienso que ese ha sido uno de los puntos fuertes de esta selección en los últimos años: hemos logrado dominar los nervios y cuanto más importante es el rival, mejor jugamos», apunta.

Para apoyarlos y manejar ese estrés, alrededor de 8.000 fanáticos viajaron desde la pequeña isla hacia Moscú, donde volverá a sonar el «¡Hú!» acompañado de aplausos rítmicos sobre la cabeza, que inmortalizaron durante la última Eurocopa.

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