Así vivió una venezolana el horror en el estadio de París

El juego comenzó a las 9 de la noche, hora local francesa. Al medio tiempo se escuchó una explosión. «Pensaban que eran fuegos artificiales», dijo la joven en una nota de voz que envió a sus compañeros en Venezuela.

«Al ratico sonó una segunda explosión y nadie se inmutó», continúa. Se dieron cuenta de que eran bombas y de que había tiroteos por «toda la ciudad». »

«Nos enteramos que era un ‘kamikaze’ en la puerta H, pero nosotros estábamos en la U, del otro lado del estadio. Se nota que a lo mejor trató de entrar y que la seguridad no lo dejó pasar y explotó ahí mismo, pero que su intención era entrar. Cuando se acaba el juego, todo el mundo se empezó a mover. Nos quedamos aquí y mientras estabamos esperando se devuelve la gente corriendo. Manadas de gente, chorros. Horrible. Y se empiezan a meter al campo de fútbol por la desesperación. No sé qué pasó. Todo el mundo sentado en la grama del estadio».

Escuche el audio aquí.

Las autoridades intentaron mantener el asunto lo más bajo perfil posible, dijo la joven. Al partido también asistió el presidente de Francia François Hollande, quien fue evacuado del lugar.

Las afueras del Stade de France fue uno de los blancos de los terroristas que atacaron a otros seis puntos de París con bombas, tomas de rehenes y tiroteos que han dejado al menos 150 muertos.

Otro venezolano en el estadio

El fotoperiodista venezolano Elyxandro Cegarra cubrió el partido amistoso para una agencia de noticias parisina. En una entrevista para el Estímulo contó que en el estadio, pocos entendieron que el estallido que escucharon era un ataque terrorista. Dijo que antes de terminar el primer tiempo se escuchó una detonación bastante fuerte:

«Al lo mejor la gente pensó que alguien había llevado algo. Yo pensé que era un mortero. La segunda explosión sí me pareció rara, pero los hinchas de fútbol gritaban con más emoción».

Sonó el segundo y el partido continuó. Al terminar el primer tiempo se enteró de que hubo un atentado terrorista, navegó en internet y vio que el presidente Hollande había sido evacuado del estadio. Siguió trabajando, aunque todo le pareció muy extraño, porque el partido continuó.

Cuando terminó el amistoso el público «saltó al campo». «Yo me fui a la sala de prensa a enviar las fotos del juego», añadió.

La gente salió tranquila del estadio, «con mucho control», había «un montón de policías afuera». Cegarra salió a buscar su carro donde lo había estacionado temiendo que una grúa se lo hubiese llevado. Lo había dejado en una zona donde no había más automóviles que el suyo.