Desde Apure, en su programa semana de propaganda oficial, Cabello afirmó que en la madrugada del lunes, 22 funcionarios del FAES acudieron al chalet en donde se encontraba escondido la que ha sido calificada por el gobierno como una «célula terrorista» y fueron recibidos a «plomo limpio».
El capitán Cabello dijo que, en efecto, se inició un proceso de negociación para que se entregaran.
«Se les dijo que el presidente Nicolás Maduro había dado la orden de resguardarle su vida (…) En ese lapso de 4:00 AM a las 11:20 AM aproximadamente, nunca dejaron de disparar contra la gente nuestra», acusó Cabello.
Su versión contradice lo difundido en una serie de videos transmitidos por las redes sociales por los rebeldes atrincherados. En uno de ellos, de unos cuatro minutos de duración, está registrada una conversación de Pérez, desde el interior de la casa, con un mayor a cargo de la operación.
Cabello dijo además que Pérez y su grupo tenían «un doble discurso», y que por un lado decían que se iban a entregar y por la otra, disparaban.
«Eran ellos mismos los que estaban disparando», dijo en referencia a los disparos que se escuchan en los videos de Instagram publicados por Óscar Pérez.
Según la versión difundida por Diosdado Cabello, las personas que estaban dentro del chalet fueron los que pidieron que Heiker Vásquez (un miembro del partido de gobierno, integrante de un grupo paramilitar de civiles armados que hace vida en la populosa zona del 23 de enero, oeste de Caracas) fuera al lugar para que los ayudara en la negociación.
«Habló dos veces con ellos para que se entregaran. Le pidieron cigarros a Heiker y él se los dio. Eso fue verídico (…) Cuando Heiker se bajó del carro una vez más, su amigo Díaz Pimentel le disparó (…) Nunca manifestaron voluntad verdadera de rendirse», manifestó el segundo hombre al mando del chavismo.
En ese sentido, advirtió que los grupos civiles armados están preparados para «defender la revolución».
Aclaró además que él en persona no dirigió las operaciones en El Junquito, pero agregó que «si tengo que defender a esos policías, salgo a defenderlos».
Reiteró la versión oficial de que los policías rebeldes tenían planeado poner un carro bomba en la embajada de Cuba en Caracas, y además tenían un supuesto plan de volar la estatua de María Lionza en la Autopista del Este, en Caracas, el 31 de diciembre.
«Mucho más valiente era entregarse. Era fácil caerse a plomo ahí (…) entregarse era más complicado. Pero no lo hubiera dejado en paz nunca la gente de la derecha», sostuvo Cabello.
Diálogo
Para el funcionario, la oposición no irá a República Dominicana porque «si no, ya se hubieran ido desde el domingo pasado». De igual forma, señaló que llegan con los puntos «prácticamente acordados» y empiezan a agregar elementos que «crean expectativas en la población».
«Se fueron con unas expectativas y regresaron más divididos que nunca», afirmó.