Venezuela

ONU desiste y delega caso del Esequibo a la Corte Internacional de Justicia

El gobierno venezolano no hizo ningún señalamiento ni había fijado posición una hora después de conocerse que se dejaba atrás el proceso de Buenos Oficios sobre el diferendo territorial.

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António Guterres
Texto: Manuel Tovar | Twitter: @mentetransfuga | FOTO ARCHIVO: EFE

La Corte Internacional de Justicia será la que resuelva la disputa fronteriza entre Venezuela y Guyana por el Esequibo. En una declaración de la oficina del Secretario General de la Organización de Naciones Unidas, Antonio Gutérres, su portavoz Stéphane Dujarric aseguró que debido a que no se ha alcanzado progreso significativo en llegar a una solución a la controversia, Gutérres procedió con su responsabilidad y escogió al tribunal para resolver el diferendo.

La oficina de Gutérres afirmó que el Ex-Secretario General, Ban Ki Moon, le comunicó a las partes el 15 de diciembre de 2016 un marco para la resolución de la controversia fronteriza por el Esequibo.

Manifestó que el Proceso de Buenos Oficios, que seguía vigente desde 1990 continuaría hasta finales de 2017 con un mandato de mediación reforzado, que encabezó el noruego Dag Halvor Nylander bajo la figura de representante personal de Gutérres.

“También llegó a la conclusión que si, a finales del 2017, el Secretario General António Guterres, como su sucesor, llegara a la conclusión que no se había alcanzado progreso significativo en llegar a una solución a la controversia, elegiría la Corte Internacional de Justicia como el próximo medio de solución, salvo que los gobiernos de Guyana y Venezuela solicitaran conjuntamente que eso no se hiciera”, señala el texto.

El gobierno venezolano no hizo ningún señalamiento ni había fijado posición una hora después de conocida la noticia, mientras que la cancillería de Guyana emitió prácticamente en paralelo a la declaración de la ONU un comunicado en el que le daba la bienvenida a la decisión y señalaba: “Guyana considera que la Corte es el foro adecuado para una decisión pacífica y definitiva a la controversia y está conforme con el proceso”.

El texto prosigue: “Guyana no permitirá que factores externos a la controversia influyan en que sean llevado a la corte pero va a continuar en el avance de relaciones pacíficas con Venezuela”.

El presidente de Guyana, David Granger, afirmó ayer en cadena nacional que era un triunfo llevar el caso ante la Corte.

La región del Esequibo abarca un área de unos 160.000 kilómetros cuadrados, ricos en hidrocarburos, minerales como el oro, bauxita y recursos naturales como madera y agua. Históricamente el territorio era considerado como la región más al este del territorio de Venezuela; hoy el gobierno de Guyana se lo adjudica tras el despojo hecho por el Reino Unido en 1899, su heredera británica lo señala como dos terceras partes de su territorio.

En el comunicado de la ONU señala que la controversia de larga data es consecuencia del Laudo Arbitral de 1899 sobre la frontera entre Venezuela y la Guayana Británica que es señalado por Caracas como nulo e írrito.

“En el Acuerdo de Ginebra de 1966, Guyana y Venezuela le confirieron al Secretario General la potestad y la responsabilidad de elegir un medio de solución pacífica entre aquellos contemplados en el Artículo 33 de la Carta de las Naciones Unidas. El Acuerdo de Ginebra también prevé que si el medio así escogido no conduce a una solución de la controversia, el Secretario General debe de escoger otro medio de solución”, señala el texto atribuido al funcionario portugués.

Guterres afirmó que sigue comprometido a acompañar a ambos Estados mientras buscan superar sus diferencias.

Reacciones

El Consejo Venezolano de Relaciones Internacionales reaccionó a la situación a través de su cuenta en Twitter: “Exigimos a la Cancillería venezolana @vencancilleria que se pronuncie rechazando las conclusiones contenidas en la Declaración del portavoz del Secretario General de la ONU @antonioguterres sobre controversia”.

Mientras que la organización Mi Mapa de Venezuela Incluye Nuestro Esequibo señaló que además de un urgente pronunciamiento del Ministerio de Exteriores de Venezuela para objetar la decisión, se debe exigir se retome el mecanismo de buen oficiante con un diálogo directo de las partes lejos de enviar el caso ante la Corte Internacional de Justicia.

Por otra parte, la organización hace un llamado para que el tema sea tratado lejos de tintes políticos como un asunto de Estado y de interés para todos los venezolanos.

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