Los empleados del Instituto de los Seguros Sociales de Chacao se cansaron de trabajar en condiciones muy por debajo de los estándares internacionales y cerraron una avenida de ese municipio del este caraqueño. Denunciaron que se quedaron sin insumos, medicamentos, agua y con una quincena que no alcanza ni para un cartón de huevos.
Fueron un poco más de 50 trabajadores. Desde enfermeras y bionalístas hasta médicos con especializaciones cerraron la avenida Arturo Uslar Pietri. En sus carteles, escritos con marcadores, mostraron sus exigencias y denunciaron su cansancio tras años de desatención hacia ellos y malos servicios hacia los pacientes.
Los trabajadores denunciaron que los pacientes necesitan ayuda inmediata. También acusaron a la gerencia de los Seguros Sociales de Chacao de amenazar a quienes denuncian las carencias del centro médico.
Marlin Rodríguez lleva 12 años trabajando en el IVSS de Chacao. Es una de las que lideró la protesta en la avenida. “Todo lo que puedes imaginar que falta en un centro de salud falta aquí. Una semana hay agua la otra no”, denunció Rodríguez, cansada de vivir lo mismo cada día y sin soluciones.
Desde hace dos años la máquina para realizar hematologías en el centro no funciona, según la bionalista. “Ni si quiera hay ibuprofeno en la farmacia, y para colmo somos un área infecciosa porque tampoco hay productos de limpieza”.
“Hace un tiempo a una compañera de trabajo le dio un ACV y no la pudieron estabilizar por la falta de medicamentos . No le encontrábamos la vía”, reveló.
Por si fuera poco todos los trabajadores están sometidos a amenazas y acosos laborales, según denunció el grupo de manifestantes. “Si faltamos nos regañan y si le decimos a los pacientes que hay escasez de medicinas o de insumos también nos amenazan. Nos prohíben decir la verdad ¿Qué quieren que mintamos?”.
Las mujeres gritaron consignas y una que otra vociferó que tendrán que amonestarlas a todas porque ninguna va a dejar la calle. Anunciaron que volverán a protestar el martes de 10:00 a.m. a 2:00 p.m. Dijeron que todas las carencias justifican sus protestas. Más aún cuando sus quincenas no llegan ni a 600 mil bolívares.
Los médicos ganan entre 400 y 600 mil bolívares la quincena, los enfermeros 210 mil y los bionalístas 410 mil bolívares, según los manifestantes. Esa cantidad difícilmente cubre las necesidades del hogar. Algunas enfermeras contaron que viven en Petare o en los Valles del Tuy, por lo que prefieren quedarse en sus casas en vez de ir a trabajar a un lugar en donde ven a la gente padecer los males de la crisis de salud.
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