FOTOS | Los turbulentos años de la Venezuela de Maduro
Mortales protestas, un presunto intento de magnicidio, opositores presos, colapso económico: Venezuela ha vivido en turbulencia bajo el gobierno de Nicolás Maduro, quien este jueves 10 de enero iniciará un segundo mandato de seis años, desconocido por gran parte de la comunidad internacional.
El líder socialista Hugo Chávez, presidente desde 1999 y fundador de la «revolución bolivariana», muere de cáncer el 5 de marzo de 2013.
Maduro, ungido por Chávez como su sustituto, gana las presidenciales el 14 de abril con 50,62% de votos, apenas 1,5 puntos arriba del opositor Henrique Capriles, quien impugnó el escrutinio.
2014: El primer desafío
En 2014, liderada por Leopoldo López, la oposición realiza manifestaciones para exigir la salida de Maduro, con saldo de 43 muertos.
López es detenido en febrero de ese año y condenado en 2015 a casi 14 años de prisión, acusado de incitar a la violencia. Desde agosto de 2017 está en arresto domiciliario.
Los precios del petróleo, que generan 96% de las divisas del país, cayeron a menos de la mitad, agravando la escasez de alimentos y medicinas.
2015: La mayor derrota
En febrero de 2015, el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, es encarcelado acusado de conspirar contra Maduro. Poco después pasa a arresto domiciliario y en 2017 huye a España.
En marzo, Estados Unidos impone las primeras sanciones contra funcionarios venezolanos a los que acusa de violar los derechos humanos.
En diciembre, en medio de un agravamiento de la crisis, la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) asesta al chavismo la mayor derrota electoral de su historia, al ganar la mayoría calificada del Parlamento.
2016: Choque de poderes
Apenas la oposición asumió su control en enero, el Legislativo fue declarado en desacato y sus decisiones nulas por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Durante casi todo 2016, la oposición intentó revocar el mandato de Maduro a través de un referendo, y organizó manifestaciones para exigirlo.
Pero el poder electoral y la justicia -de línea oficialista- lo frenaron, alegando fraude en la recolección de firmas para solicitarlo.
2017: Protestas y Constituyente
El TSJ se atribuye facultades del Parlamento y el 1 de abril estallan protestas que dejaron unos 125 muertos en cuatro meses. La fiscal general, Luisa Ortega, denunció una ruptura del orden constitucional y meses después dejó el país denunciando «persecución».
El 30 de julio se realiza la cuestionada elección de una Asamblea Constituyente con poder absoluto y totalmente oficialista, que sustituyó en la práctica al Parlamento y fue desconocida por varios gobiernos. Las protestas, desgastadas, cesan.
Washington aprueba sanciones financieras contra Venezuela y su petrolera PDVSA, declarados luego en default parcial.
El chavismo arrasa en las elecciones de gobernadores de octubre y en las municipales de diciembre. La oposición denunció fraude, aunque no participó en estas últimas.
2018: Reelección
Ante una oposición fracturada, la Constituyente decidió en enero adelantar las presidenciales, con Maduro como candidato.
Fracasa un diálogo entre la oposición y el gobierno sobre garantías comiciales y las autoridades fijan las elecciones para el 20 de mayo.
La MUD decide boicotearlos aduciendo que son un «fraude». El opositor Henri Falcón, disidente del chavismo, se desmarca y lanza su candidatura.
Estados Unidos, varios países de Latinoamérica y la Unión Europea desconocieron las elecciones.
Maduro fue reelegido con 68% de votos y la mayor abstención en unas presidenciales (52%) en la historia democrática venezolana.
En tanto, la vital producción petrolera cae a los niveles más bajos en tres décadas (1,4 millones de barriles diarios).
El 4 de agosto, el mandatario denunció un intento de magnicidio con dos drones cargados con explosivos que estallaron cerca de la tribuna donde presidía una parada militar.
Maduro culpó al diputado opositor Julio Borges, al entonces presidente colombiano Juan Manuel Santos y a Estados Unidos. Unas 25 personas fueron detenidas, entre ellas el legislador Juan Requesens y dos generales.]]>
"Fue muy difícil. Se hace el partido muy feo, muy trabajo, no podíamos dar dos pases seguidos (...). Es difícil jugar así", dijo el astro argentino tras el empate 1-1
"Me queda un sabor agridulce (...). Viniendo de abajo en el marcador, Venezuela terminó siendo superior, apretando", expresó Batista en conferencia de prensa. "Creo que hoy merecimos ganar"., Su colega, Scaloni dijo que el partido no debió jugarse