Monseñor Mario Moronta, indicó que recibió con estupor y preocupación la noticia de que casas y el templo de Santa Lucía en la población fronteriza Rubio, fueron marcadas con una Cruz y las iniciales del Ejército de Liberación Nacional (ELN), como indicativo de ser un objetivo militar, como indicativo de ser un objetivo militar.
A los hechos, se le suma – detalló El Obispo- la aparición por debajo de las fachadas marcadas de unos volantes presuntamente firmados por la organización guerrillera colombiana, donde declaran objetivo militar a varios dirigentes políticos, entre las cuales se encuentra el sacerdote Richard García, párroco de la iglesia.
La máxima autoridad de la iglesia en el Táchira, catalogó la acción como una forma de amedrentamiento y de amenaza contra personas que tienen el derecho de pensar distinto al Ejecutivo y a sus seguidores.
Según Monseñor Mario Moronta, esto refleja el estado de indefensión al que están expuestos los ciudadanos, teniendo en cuenta que el referido grupo ELN no tiene legal ni constitucionalmente derechos para actuar en el territorio nacional.
“Nos preguntamos ¿dónde está la presencia de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana que debería, según lo indica la Constitución, proteger a la ciudadanía ante los embates de cualquier tipo de grupo irregular?”
Exhortó a recibir un pronto pronunciamiento del ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, de los comandantes de la REDI y ZODI en el estado Táchira.
“Son responsables directos de lo que les pueda pasar a esos ciudadanos y a cualquier civil de nuestra región si son atacados por el mencionado grupo”.
Dijo que resulta inadmisible que se amenace a la ciudadanía con estas acciones que ya son repetitivas.
“Ya se hizo en San Antonio del Táchira por parte de grupos civiles armados, ahora lo hacen en Rubio”, puntualizó la autoridad católica.
A la Fiscalía
Ante la sede del Ministerio Público acudieron los dirigentes políticos a quienes les marcaron sus viviendas y recibieron amenazas a través de panfletos en la población de Rubio, municipio Junín.
Ellos exigieron al organismo nacional abrir una investigación en la cual se dé con los autores de las referidas acciones que no solo ponen en peligro sus vidas sino también a su grupo familiar.
“En el hecho señalan al padre Richard García, él solo bendice las actividades pacíficas que hacemos y da un mensaje de paz y protección antes de cualquier actividad. Él sabe que enfrentamos una lucha y su acompañamiento no es político sino espiritual, pide paz y cambio para Venezuela”, comentó Mariela Betancourt, una de las agraviadas y además coordinadora del Frente Amplio en Rubio.
La dirigente política, teme por su vida teniendo en cuenta que el volante que le fue enviado señala que si no cesan los actos políticos en el municipio, “vienen por nosotros y nuestras familias”.
Los habitantes de Rubio, han manifestado cierto temor ante las amenazas y algunos señalan que no participarán en actividades políticas. Sin embargo, otro grupo lo deja ver como una acción que solo busca sembrar el miedo colectivo y pese a esto continuarán en la lucha por la libertad y democracia de Venezuela.
“El hecho se lo adjudica el ELN, pero a su vez ellos están haciendo un llamado a la Guardia Nacional, a los colectivos (grupos armados chavistas) y demás grupos afectos al gobierno de Maduro, hacen mención a toda una estructura política que va en contra nuestra, nos llaman terroristas, los 12 apóstoles del terror porque los actos que hacemos para lograr el cese de la usurpación son terroristas», sentenció.