Los brujos de Petare no le tienen miedo al coronavirus
Frente a la escasez y a los altos precios de la medicina en Venezuela, hay personas que prefieren el espiritismo antes que la ciencia. En Petare, la barriada más populosa de todo el país, hay un callejón completo dedicado a esos oficios de curanderos. La sesión cuesta 3 dólares (más que un salario mínimo mensual) y mientras el consultorio del doctor de la zona está casi vacío, en el de los brujos la gente hace fila: aseguran que hasta reciben a contagiados de covid-19.