Se quedó sin milagros la "Corte Malandra"
Los delincuentes del país, en su necesidad de mirar al cielo, cuando la muerte aún no hace la emboscada, buscan en homólogos de profesión patronos y mártires. Les rezan y elevan súplicas. El asunto es que no les paran y ponen en duda la credibilidad de sus portentos