En un estudio reciente publicado por el diario Archives of Sexual Behavior, el 27 por ciento de 4.000 hombres encuestados no estaban conformes con el tamaño o la forma de sus penes. El estudio también encontró que aquellos hombres insatisfechos tenían menor actividad sexual en comparación con aquellos que sí están conformes con sus genitales
Las consecuencias de toda esta “insatisfacción genital” es que más y más hombres están tratando de arreglar estos “pequeños problemas” al inyectarse cosas inusuales en sus regiones privadas, siendo algo que se ha convertido incluso más prevalente cuando el control de la natalidad masculina se vuelve extensamente accesible.
El caso: Vasalgel, un hidrogel de polímero que se inyecta en los conductos deferentes (los espermatozoides nadan a través del tubo) y bloquea la esperma. El procedimiento es similar a la vasectomía sin bisturí, con la excepción de que el médico inyecta el conducto deferente con el gel, en lugar de cortarlo.
Sin embargo, al inyectar químicos como heroína o aceite de oliva, los hombres que han realizado estos experimentos dignos de “científicos locos”, no solo toman en cuenta los problemas relacionados con el tamaño y la forma de sus penes, sino también se enfocan en sus necesidades. Es decir, si necesitan mejorar su masturbación se inyectan una solución salina o si quieren estar bajo el efecto de las drogas, optan por inyectarse heroína o cocaína.
Por si alguna vez se te ocurrió recurrir a estos métodos para mejorar el aspecto y la funcionalidad de tu pene, luego de leer estos casos seguramente cambiarás de parecer.
Para tratar la disfunción eréctil
Priapus Shot: De acuerdo con el Doctor David Ghozland, el Priapus Shot o P-Shot es “un procedimiento que usa plasma rico en plaquetas del cuerpo del propio paciente para rejuvenecer el tejido que fue dañado o envejecido”.
Dicho procedimiento dura solo 30 minutos, pero puede llegar a costar hasta 2.500 dólares. Luego de su aplicación, los pacientes son capaces de tener una erección dentro de 48 a 72 horas debido a que el efecto de estas inyecciones incrementa el flujo sanguíneo (por años) desde las glándulas hasta el pene naturalmente.
Caverject, Edex y Trimix: A diferencia de la Priapus Shot, estas son inyecciones auto suministradas. De hecho, estos medicamentos salieron al mercado antes que la Viagra y funcionaron en un 80 por ciento de los hombres que la utilizaron. La medicina inyectada trabaja similar a la Viagra y una vez inyectada, hace dilatar las arterias del pene permitiendo el flujo sanguíneo. Luego de su aplicación, se puede tener una erección dentro de 5 a 15 minutos.
La cantidad de medicación inyectada es dictada por el doctor, quien es el que se encarga de aplicar la primera inyección. De acuerdo con el doctor J. Francois Eid, esas inyecciones se deben realizar “12 veces al mes, y alternarlas entre el lado derecho e izquierdo del pene”.
Advertencia: No seas codicioso. Si no tienes disfunción eréctil y solo estás buscando alcanzar una súper erección, las cosas no terminarán bien.
Hacerlo más grande
Grasa: Algunos hombres han optado por extraer grasa de su abdomen e inyectarlo entre la piel y el tejido eréctil del pene. Más allá de las complicaciones que implican este tipo de inyecciones (infección, abscesos, deformación), el principal problema con inyectar grasa en tu pene es que ésta podría derretirse si los vasos sanguíneos no crecen correctamente hacia el tejido.
“Si no crecen en tres días, la grasa morirá y será absorbida por el cuerpo”, afirma el cirujano plástico Dr. Arthur Perry.
Colágeno: las inyecciones de colágeno son una opción muy popular en los hombres que están interesados en agrandar su paquete. Pero debido al hecho de que es auto suministrado, las complicaciones suelen ser comunes.
Aceite de Oliva: últimamente se ha convertido en una moda entre los hombres tailandeses el hecho de inyectarse aceite de oliva en sus penes, debido a que es una manera accesible y barata de incrementar el tamaño de los mismos. Alrededor de 30 o 40 hombres acuden cada mes al hospital debido a ello. Los hospitales tailandeses presenciaron desde deformidades, hasta un hombre que necesitaba remover sus genitales luego de inyectarse aceite de oliva por 19 años y como consecuencia, se desarrolló un cáncer de próstata tras una infección.
Para acabar
Solución salina: la cantidad de solución salina depende del nivel de confort y la experiencia de la inyección. En 2003, un hombre se inyectó 900 mililitros de esta solución en su escroto. Estaba bien, aunque sintió un poco de incomodidad.
Y más allá de esa incomodidad, la práctica acarrea un número de riesgos: puedes contraer una infección, celulitis en el escroto y gangrena.
Para drogarse
Heroína: los heroinómanos ocasionalmente cuando se cansan de inyectarse esta sustancia en varias partes de su cuerpo, piensan “¿Estará bien inyectarme heroína en mi pene?”. Como en el caso de un hombre en Nairobi, Kenia quien decidió inyectarse Heroína en sus genitales y murió a causa de ello. Esta acción podría causar gangrena y la pérdida del pene.
Cocaína: en junio de 1988, un hombre en Nueva York solía inyectarse cocaína en el pene para tener erecciones más duraderas, pero en una ocasión se sobrepasó de la dosis y su erección duró tres días antes de que él decidiera recibir atención médica. 10 días después, se le desarrolló una gangrena que se expandió en los genitales, brazos, piernas, espalda y pecho. Posteriormente, los médicos del Hospital-Cornell Medical Center tuvieron que amputarle ambas piernas, el pene y nueve dedos.]]>
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