Publicidad

#dedo morado

Yo no mostré mi dedo morado (o mi chiquito morado, como quieran)

El domingo hice una pequeña prueba. Escribí en Facebook una frase donde preguntaba si me creían que había votado aunque no mostrara mi dedo morado. Algunos se tomaron mi comentario con humor, lo que era un poco la intención; otros, no obstante, no estuvieron tan contentos con mi pregunta. Cabe destacar —cabe destacar, cabe destacar—, que por ninguna parte —por ninguna parte, por ninguna parte— de esa pregunta, critiqué a los que mostraban su foto con su dedo morado. Es decir, NO estuve NI estoy en contra de las cientos de personas maravillosas que mostraron sus dedos. En ningún momento dije nada en contra de esa belleza cívica. (Y disculpen que repita una y otra vez, pero me he dado cuenta que a algunas personas suspicaces les hacen falta las repeticiones o las sobre explicaciones.)

Publicidad