Los hombres se niegan a vestir santos
Juan Pablo Galavís, 32, arribó en limosina a una mansión en Los Ángeles, California. Rubio y con porte de futbolista, que lo fue profesionalmente
Juan Pablo Galavís, 32, arribó en limosina a una mansión en Los Ángeles, California. Rubio y con porte de futbolista, que lo fue profesionalmente