Músico venezolano fue agredido por la policía en protestas de Black Lives Matter

Ese día Julio llegó a la protesta al medio día, para encontrarse un grupo de gente concentrada cerca de los headquarters de la policía de Saint Louis, Missouri.
Pacíficamente los manifestantes cantaban consignas y se plantaban frente a la institución sin intenciones de agredirla, aunque vale recalcar que un pequeño grupo se abalanzó sobre una patrulla, lanzándoles objetos al parabrisas y subiéndose sobre el mismo. Por esto se presentó un grupo especial que comenzó a avanzar sobre los civiles.
“De repente llegaron 50-60 pacos, con equipo anti motín se nos fueron encima, una señora se mantuvo firme y levantó las manos haciendo la señal de la paz. Le pasaron por encima y traté de levantarla, me golpearon dos veces con un escudo y me rociaron con maze (una especie de gas lacrimógeno en spray)”

La señora fue apresada, simplemente por mantenerse firme, aunque Julio huyó por miedo al encarcelamiento, sintió rápidamente los efectos de la represión.
“Al principio no sentí nada, pero cuando parpadeé me empezó a arder toda la cara muchísimo, también los brazos no sé por qué, tenía mucho moqueo y se me hacía difícil respirar. En momentos no podía ver.”
Las protestas comenzaron en St Louis por el caso de Jason Stockely, policía declarado inocente que hace 6 años asesinó a Anthony Lamar Smith joven afroamericano de 24 años. La frustración es que sólo se debió a una persecución y la fiscalía alegaba que fue premeditado, argumento que sostiene el movimiento Black Lives Matter, quienes apoyan las protestas y aseguran que no hay igualdad en cómo se percibe el afroamericano promedio por los policías o por el sistema judicial.
Julio se identifica con esto.
“Protesto porque USA siempre ha hecho racismo sistemático, este país no sería nada sin la mano de obra y sufrimiento que recibió de los esclavos; a pesar de esto los policías perciben a los negros cómo criminales o merecedores de muerte, esto es así, no es un mito.”
Julio es originario de Caracas y no es extraño a las protestas de acá, viviendo ambas situaciones es imposible no hacer una comparación entre ambas.
El músico donó los fondos de uno de sus toques a una causa de su primo para la crisis en Venezuela (siendo este su ingreso principal).
“En Venezuela la situación es mucho más crítica, aparte más evidente, en Estados Unidos los problemas están debajo de la mesa y te venden un falso sentido de calma por lo que reconocer los problemas es más difícil y se hace más fácil que la gente se rinda, en Venezuela me consta que la jornada fue más intensa, mi mamá está allá y temo por ella. Mi admiración profunda va con los que protestaron allá y siguen luchando de alguna forma, nada me importa más que mi país de origen, aunque esta es mi casa ahora y siento que lo que hago es correcto y mi deber como ser humano. Es una injusticia ante la que necesito protestar.”
Las situaciones políticas son muy distintas, mientras la polarización ideológica se incrementa con la llegada de Trump, muchos se lamentan por el fracaso de sus líderes, mientras otros sienten su racismo justificado. El inmigrante ve la confianza de los políticos destruida, tanto estadounidenses cómo venezolanos.
“Aquí es más fácil rendirse, por la misma sensación de calma, la gente no siente tanto los problemas; por eso me sorprendió que se detuviera la protesta en Venezuela. Siento que ahora para llegar a una oficina (política) se tiene que ser una especie de estrella pop y es normal por el momento tecnológico que estamos viviendo, muchos ven el mensaje de Bernie Sanders cómo comunista por hablar de socialismo democrático y tal vez lo pudo vender mejor, sólo siento que planteó cosas cómo que en Estados Unidos la salud pública es deficiente y no lo supo vender”
“En Venezuela es importante identificar a los políticos que se apegan a un mensaje, oyen al pueblo y canalizan lo que quieren porque eso es lo que la gente necesita y lo que te lleva a liderar; admiro mucho a Maria Corina Machado, por ejemplo, la siento plantada en sus ideales y puente de lo que quiere decir la gente.”
Comparar las fuerzas policiales también es inevitable; en Estados Unidos a muchos sorprende que sean fuerzas represoras o parte de un sistema deshonesto.
“Antes pensaba que estaba mal generalizar, que era incorrecto pensar que todos los policías eran asesinos, pero si eres parte de un sistema que oprime y discrimina a la gente, eres parte del problema.”
Black Lives Matter y los que se les unen en protesta se plantean un objetivo principal: Crear una nueva junta cívico-policial, para que los ciudadanos estadounidenses tengan una manera de hacer llegar sus denuncias de forma más directa.
“Una nueva junta de policías y civiles es necesaria, la actual es cómo si no existiera. Creando una nueva cómo canal de comunicación se establece más control sobre la policía y le das más poder a la gente.”]]>