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Trump rechaza condena mundial contra Arabia Saudí por caso Khashoggi

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rechazó el martes la condena mundial a Arabia Saudita por la desaparición y presunto asesinato del periodista Jamal Khashoggi, diciendo que el reino merecía ser considerado inocente.

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Foto: AP/Evan Vucci

En una entrevista con Associated Press, Trump hizo un paralelismo con las acusaciones de agresión sexual que casi derribaron a su candidato a la Corte Suprema, Brett Kavanaugh.

«Aquí vamos de nuevo con, ya sabes, eres culpable hasta demostrar lo contrario», dijo. «No me gusta eso. Acabamos de pasar por eso con el juez Kavanaugh y él era inocente en todo lo que a mí respecta».

«Creo que tenemos que averiguar qué pasó primero», dijo Trump.

Khashoggi, quien pasó de ser un  a un «insider» crítico de la monarquía conservadora de Arabia Saudita, fue visto por última vez el 2 de octubre cuando acudió al consulado saudí en Estambul para resolver trámites matrimoniales.

Su desaparición ha tensado las relaciones del reino con Washington en medio de una fuerte presión en el Congreso y los medios estadounidenses para evitar que el tema sea escondido bajo la alfombra.

Trump envió al secretario de Estado Mike Pompeo a Riad para hablar directamente con la realeza de Arabia Saudita, y él mismo habló el martes más temprano con el poderoso príncipe heredero Mohamed bin Salmán quien le aseguró que se estaba realizando una investigación «completa».

Arabia Saudita es uno de los aliados más cercanos de Estados Unidos en un intento por socavar a Irán y también un cliente importante de la industria armamentista estadounidense.

Ante la petición del yerno y asesor de Trump, Jared Kushner, su gobierno ha establecido las buenas relaciones con Mohamed -representado como un modernizador saudí- como una prioridad.

Anteriormente, Trump amenazó con un «castigo severo» si se demuestra que Khashoggi fue asesinado en el consulado saudí. Pero también expresó que elementos «deshonestos» pudieron haber llevado a cabo la operación y ha descartado recortar las ventas de armas estadounidenses, de las que Arabia Saudita es el mayor comprador extranjero.

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