El director de la ONG Codevida, Francisco Valencia, le confirmó a El Estímulo que hasta la fecha han contabilizado al menos siete personas fallecidas en el país por falta de tratamientos y escasez de medicamentos para personas con problemas renales.
“Hasta el momento sólo hemos confirmado a siete personas, a pesar de que se rumora que la cifra es mayor. Sin embargo, hasta que no tengamos nombre y apellido no podemos dar pronósticos”, aseguró Valencia este jueves en una conversación telefónica.
No obstante, el director de Codevida aseguró que es “muy probable” que el número de fallecidos sea mucho mayor.
El pasado martes, el diputado opositor, Winston Flores, aseguró que hay al menos 23 personas fallecidas en el país por falta de tratamientos para la diálisis.
Grupos de pacientes han manifestado en diversas partes del país en rechazo al silencio oficial ante las muertes y la agonía que sufren 16.000 pacientes renales en todo el país, según Codevida.
El gobierno de Nicolás Maduro, que niega una crisis humanitaria en Venezuela, asegura que ha entregado los filtros que requieren las más de 32 unidades de diálisis en Venezuela que están -en la práctica- paralizadas. Codevida asegura que esos insumos son insuficientes y muchos se han consumido.
Los estados Lara, Zulia y Cojedes son las entidades más afectadas por la crisis con los pacientes renales. Una de las víctimas confirmadas es el padre Neomir Barrientos, quien falleció en el hospital Domingo Luiciani de Caracas.
Desde los ocho años, Yitzah Indave sufre de los riñones. Poco tiempo después de conocer su padecimiento, recibió un trasplante que a inicios de 2021 dejó de funcionar. Por eso, sus redes sociales se han convertido en una vía para reunir el dinero para continuar su tratamiento y lograr su mayor deseo, viajar para recibir un nuevo trasplante que le permita cumplir sus metas
La correcta alimentación juega un papel importantísimo en los pacientes renales, se vuelve la medicina de estas personas sobre todo en Venezuela donde hace cuatro años se suspendieron los trasplantes y recibir diálisis adecuada es una odisea y una cuestión de suerte.
Falta de personal médico, máquinas dañadas, equipos que no funcionan o plagas de moscas y mosquitos en los lugares de atención, son algunas de las dificultades que enfrentan estos venezolanos
