"Young Miko ve Ni Me Ladilles"

En plena pandemia –año 2020-, Eugenia y Santiago comenzaron a interactuar en Twitter con mucha frecuencia y sus seguidores –que sumaban una cantidad importante- sugirieron la idea de que ya que eran viejos amigos, crearan algo juntos. Es así como casi por accidente, casi por dejarse llevar a ver qué pasaba, nació el podcast Ni Me Ladilles.

Al principio dudaban del proyecto por muchas razones. “Tenía la mentalidad incorrecta de que ya habían muchos podcasts, para qué otro”, cuenta Santiago.

Y había otro aparente problema de orden geográfico: Eugenia Siso vive en Estados Unidos, Santiago Castellanos en España y el grueso de su comunidad es de Venezuela. Hacer un podcast a distancia les daba un poco de temor y no querían hacerlo como la típica llamada de Zoom, por eso es que su estética es diferente y según muchos ese es un valor agregado que los diferencia.

En dos años, Ni Me Ladilles se ha convertido en uno de los podcasts más escuchados y seguidos del país. Y en su primera visita a Caracas -febrero- para presentarlo en vivo, agotaron casi de inmediato tres funciones en el Anfiteatro del Hatillo.

Están apadrinados por el equipo del muy exitoso Escuela De Nada. Chris, Leo y Nacho les han dado muchos consejos y herramientas para su carrera y los acompañan, además, como productores bajo el nombre de EDN Media House.

-¿Cómo llegó Ni Me Ladilles a EDN House?

-Eugenia: Había un concurso que se llamaba Academia EDN al que aplicamos con un video de 9 minutos, básicamente una recopilación de todo lo que ya habíamos hecho. Nosotros comenzamos el podcast en septiembre, el concurso fue en diciembre y firmamos el siguiente diciembre. Fue un proceso largo, ganamos como único proyecto entre 300.

Santiago: Era como una academia en la que te podías inscribir para aprender y luego de hacer el curso, podías meter un proyecto para que ellos apadrinasen. Podía ser un proyecto desde cero, podía ser una idea.

Eugenia: Algo muy lindo qué nos pasó fue que no nos parecía tan útil porque ya teníamos todo. Dijimos “estamos en el camino correcto porque todo lo que estos tipos dicen que hay que hacer, ya lo estamos haciendo”. Fue más bien como la confirmación de que íbamos por dónde era.

-¿Y sienten que estar acompañados por Escuela De Nada les ha dado más visibilidad o fama?

-Eugenia: Fama no, herramientas. Porque pienso en los momentos más virales de Ni Me Ladilles y no están conectados directamente con Escuela De Nada. Lo que siento es que íbamos a subir la escalera y EDN fue subir en ascensor esquivando problemas. Cosas que podemos decir “mira nos parece demasiado complicado hacer esto”, ellos ya lo vivieron y te dicen “mira ahórrate esto y vete por aquí”.

Santiago: De hecho, agarrar fama por ellos hubiese sido que montaran historias como “Santiago y Eugenia son increíbles, síganlos, vean su podcast” y eso nunca pasó. Trabajamos con ellos por lo menos 9 meses y la única pista que podías tener de eso es que como productora al final del episodio salía la tapa de ellos. Nunca fue un tema de “enchúfate y ya”, es un tema de “te voy a dar las herramientas para que lo hagas tú solo”.

-¿Para crear NML se inspiraron en Escuela De Nada o en algún otro podcast?

-Eugenia: Nos hemos inspirado en ellos más en la parte de negocios, con EDN hemos entendido mucho la parte de negocios, pero cuando creamos el contenido consumimos mucho TikTok… Creo que la primera inspiración que tuvimos fue Drag Race, en cuestión de estética.

Santiago: El tema de la pandemia hizo que muchos podcasts eran una llamada de Zoom y grababan la pantalla, pero los programas de YouTube eran en un estudio, montaron estudios en sus casas y por un programa de Drag Queens vimos que hablaban con earpods y simplemente hacían un estudio en su casa. Esa fue nuestra inspiración como estética y creativa. EDN es algo más como a lo que queremos llegar con este proyecto, en cuanto a negocios y de crecimiento personal y profesional.

-¿Cuál fue el episodio en el que sintieron que se hicieron más conocidos o se viralizaron más?

-Eugenia: No son tanto episodios, sino momentos. Hubo un video en el que estábamos hablando de canciones y del mundo de la música de antes versus la de ahorita y yo dije “la letra del reguetón ha mejorado porque que Rakata dijera Mami acelera duro a hacer pupú está chimbísimo”, pero no decía eso y la vaina empezó a rodar. Wisin y Yandel le dieron RT y dijeron: “Estás en problemas”. Ese fue un jalón por el que pasamos de 9.000 a 25.000 seguidores en horas.

Santiago: Y fue increíble, porque fue un mes antes del show en Miami y conectó todo. La gente nos empezó a conocer más, vendimos el show, hicimos la primera presentación y todo escaló muchísimo. En nuestras métricas hubo un crecimiento como de 150% en tres meses.

Eugenia: Y ahí nos empezó a llegar gente de Puerto Rico y cuando hacemos lives nos dicen “vengan a Puerto Rico”, “vengan a Bayamón”. También está en el que nos burlamos de los reviews de los restaurantes o nos hemos cruzado en TikTok cuando Santiago dice una vaina loca como “Soy penoso” y “Un minuto después de conocerme” y es el audio de Santiago… Han sido cosas más así. Creo que TikTok ha sido el gran jalón.

Santiago: También muchas cosas que nos han hecho viralizarnos no las hacemos nosotros, son memes que hace la gente que nos sigue. Uno cree que la audiencia es completamente venezolana, pero uno no dimensiona el algoritmo de TikTok. Me ha pasado que yo vivo en Madrid y he ido a locales donde gente que se ve que es española, me reconocen. Lo que más me impresionó es que fui a Cartagena en diciembre y la chica que vendía en una heladería me reconoció.

Eugenia: Young Miko ve Ni Me Ladilles

Santiago: Y son cosas que no te hubieras imaginado, pero tiene sentido que por ejemplo un fan ve eso y se lo mande a ella por DM porque sí y capaz ella lo ve o tiene una amiga que se lo manda y son cosas que pueden pasar.

-¿Esperaban la recepción de la gente aquí a los shows en vivo?

-Eugenia: Esperábamos que se vendiera, pero nunca tres funciones.

Santiago: Nosotros soñamos, pero también somos muy realistas. Sabíamos que iba a ser una locurita increíble, aunque nunca dijimos “vamos a vender el teatro en cinco horas y luego vamos a vender tres». Fue como que “sabemos que va a ser muy muy grande, pero poco a poco” porque no queremos ponernos metas que quizás nos decepcionen. Preferimos sorprendernos.

Eugenia: Sí lo llegamos a subestimar. Creíamos que iba a ser un teatro y de hecho, empezamos a vender en diciembre porque dijimos “bueno, si es en febrero que se venda entre diciembre y enero” y se agotó en 4 horas, sacamos la segunda que se agotó en 4 horas y la tercera duró una semana.

-¿Creen que tendrían el mismo éxito si hubiesen empezado el podcast en Venezuela?

-Santiago: No. Hay un tema de ser ajeno porque siento que acá te mueves, tienes amigos y muchos círculos. Cuando vives afuera y el público no tiene un contacto directo contigo genera más curiosidad de saber de esta gente a la que yo no me encuentro en la calle, no me encuentro en fiestas, no viven en el mismo lugar. También está el tema de traer. Traemos experiencias de nuestra vida cotidiana, las mías vienen de una cultura, las de Eu vienen de otra y nos ve gente que tiene otra cultura. Entonces, esa curiosidad de decir “ah mira, esto pasa en Madrid” o “esto pasa en Miami”.

-¿Alguna vez han querido parar el proyecto?

-Eugenia: No. Cuando estábamos empezando tuvimos una conversación y dijimos que en el momento en que nos ladillemos de esto, nos vamos a una oficina.

Santiago: Siempre estuvimos conscientes de que si no funciona hay que cambiar la fórmula regular. Nos dimos un tiempo mínimo para ganar dinero porque es un sacrificio grande. Estamos a seis horas de diferencia, estoy haciendo un esfuerzo monetario y físico aquí que si al final del día no se me retribuye, estoy perdiendo el tiempo. Es esa cosa que cuando haces algo por muchísimos meses y no tienes el crecimiento que tú quieres, tienes que tener la humildad de echar pa’ atrás y decir “déjame cambiar un pelo la fórmula porque aquí algo no está funcionando”. Vimos que nuestras métricas siempre iban creciendo. Somos muy conscientes de eso viendo los números para ver si queríamos parar o cambiar, pero como siempre corrió bien no lo hemos planteado.

-¿Cuál consideran que fue el mayor reto de Ni Me Ladilles?

-Eugenia: El horario, hacerlo parte de nuestra rutina. El reto estaba en que hay demasiado contenido repetitivo y nosotros hemos tratado de mantener distintos temas. Hicimos hace poco un episodio de “Princesas cayéndose a golpes”. Es muy fácil caer en la crítica, en nosotros opinar siempre de algo y hemos hecho el esfuerzo de no hacer contenido que sea de opinión sino simplemente contenido ligero. Además de un reto, ha sido una meta de Ni Me Ladilles.

Santiago: Un reto también ha sido dimensionar el impacto de todo y que tú tienes una responsabilidad, lo que tú dices tiene un eco en muchas personas y eso puede crear cualquier tipo de pensamiento, conclusión, sentimiento, inseguridad, lo que sea… Tú te puedes meter en el papel de “estoy en mi estudio y somos tú y yo hablando”, pero nunca somos nosotros dos nada más: hay una audiencia gigante allá afuera que todo lo que decimos repercute en ellos y tienes que estar muy consciente de que tus palabras pesan.

-¿Qué se viene este año para Ni Me Ladilles?

-Eugenia: Estamos planeando una gira por Latinoamérica, queremos hacer la gira por Venezuela, pero esas cosas toman tiempo. Tenemos varias presentaciones en Estados Unidos, pero creo que para el 2025 sería la gira de Estados Unidos y Europa. Ahorita, sería Latinoamérica cuanto antes.

Santiago: Nosotros somos muy precavidos en lo que probamos primero, entonces vamos muy despacio. Probamos Miami y funcionó, hicimos otra; probamos Madrid funcionó,volveremos; primera vez en Caracas… Entonces, es como poquito a poco para entender todos los aspectos…

* Gracias a Cusica Studios por recibirnos en sus espacios para esta entrevista