Durante un acto en apoyo a la candidata del PSUV, Carmen Meléndez, a la gobernación del estado Lara, El Aissami subrayó que la oposición «siente miedo» de sentarse a llevar a cabo un diálogo y dijo que los mismos «lo niegan».
«A esta hora está sentada la oposición sentada en República Dominicana (…) y qué bien que ellos por fin se den cuenta de que la vía del diálogo es la vía del entendimiento político. No lo nieguen (…) Además, un demócrata nunca puede renunciar al diálogo», señaló.
Con respecto a las elecciones regionales, el vicepresidente descalificó al actual gobernador de la entidad, Henri Falcón, al tildarlo de «traidor» y «fracasado». De igual forma, aseveró que aún se encuentran esperando que se pronuncie y fije posición sobre las protestas antigubernamentales que se registraron en la entidad.
Aseveró que Falcón no tiene nada de qué sentirse orgulloso, debido a que es «incapaz» y «cobarde» porque según su opinión, «a Henri le hemos tendido la mano una, dos, tres cinco veces para trabajar y siempre la puñalada». Para Tareck El Aissami, la agenda personal del mandatario regional se impone, debido a que «se siente candidato a Presidente».
«Le quedan cuatro semanas, porque el 15 de octubre se le acaba la carrera política», sentenció.
Ante eso, criticó que en Lara existan varios rubros «abandonados» como la salud, la vialidad y el desarrollo industrial, por lo que instó a sus partidarios a votar por la ex ministra de la Defensa.
Insistió en que la Mesa de la Unidad «tiene una doble moral», ya que después de criticar al sistema electoral y «boicotear» las acciones del Gobierno durante 18 años «llegan como corderitos a decir que voten por mí (…) Después de que dijeron que no participarían hasta que caiga la dictadura. Cínicos».
Adelantó que el presidente Nicolás Maduro aprobó para la también protectora de Lara, Carmen Meléndez, la suma de 3.600 millones de bolívares y 153 mil «divisas» para reparar el monumento de la Flor de Venezuela.
Además, dijo que este 15 de septiembre llegarán al país representantes de la empresa petrolera rusa Rosneft, con quienes el gobierno venezolano empezará a comenzar la comercialización del petróleo «en una moneda distinta al dólar».]]>
