Venezuela

Esteban Torbar: Venezuela será una potencia turística mundial

Eposak… logro en lengua pemona, resume la visión de vida de Esteban Torbar. Su idea de turismo experiencial, está intrínsecamente unida al desarrollo sostenible del área, a la transformación de la sociedad y a lograr su sueño que Venezuela sea una potencia en el área.

Esteban Torbar con niños pemones
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Kamarata, un remoto poblado pemón al sur del Auyantepuy, en el estado Bolívar, es la fuente de inspiración de Esteban Torbar, fue en ese lugar donde inició su misión de vida de hacer un turismo experiencial y sostenible en el país que tanto quiere y en el que desea la gente emprenda.

“Yo le dedico mucho tiempo, me ha conectado con mi propósito de vida, lo que me ha permitido tener un impacto en las comunidades. Sueño con que Venezuela sea realmente una potencia turística de la que todos nos sintamos inmensamente orgullosos”, afirmó.

Todo empezó con una churuata

Torbar, empresario dueño de Turismo Maso, una agencia turística con más de 65 años en el mercado, era un asiduo visitante de la zona de Kamarata, Gran Sabana. Un día un pemón se le acercó y le preguntó si podía ayudarlo a hacer una churuata matrimonial. Sin saberlo, echó a andar un proyecto que hoy despunta en la zona.

“Fue allí que empezamos a ver lo que se logra si juntamos a mucha gente para ayudar. Esa semilla se convirtió en algo que le ha dado mucho propósito y ha tenido un impacto importante en la gente de esa y otras comunidades”, manifestó.

“En 2010 arranqué Eposak como una inquietud personal, queríamos ver cómo podíamos colaborar con el desarrollo social”, dijo al referirse al proyecto impulsado con el propósito de impactar y transformar la vida de comunidades a través del turismo sostenible.

Soñando y emprendiendo

“La idea es contribuir a rescatar la autoestima en muchas comunidades de Venezuela, es lograr que crean en el futuro y motivarlos a emprender, para que en ese proceso mejoren sus condiciones económicas y sociales”, afirmó.

Si bien Turismo Maso, la agencia de viajes que encabeza desde hace 25 años, sirve a cuentas corporativas y personales a través de canales tradicionales, la empresa también ha accedido a canales menos tradicionales, a través de vendedores independientes, gente que quiere emprender y ser agente o vendedores de viajes.

“Son gente que está soñando con hacer otras cosas, una posada, una ruta turística. Nosotros tratamos no solo de trabajar en lo que hemos hecho, sino también de apoyar el emprendimiento porque consideramos que esa es la solución para Venezuela. Yo estoy seguro de que el país se reconstruirá con ese esfuerzo emprendedor que no has caracterizado siempre. Queremos atraer a gente que quiera emprender en el área de viajes”, dijo.

Entender la comunidad

Para Torbar, Kamarata es uno de los lugares más hermosos del mundo, pero los 3.000 indígenas kamaracotos que viven allí están entre las comunidades más pobres de Venezuela. Los problemas que enfrentan son inmensos y, asegura, que esa es una gran dificultad, pues no puede existir el turismo sano, con una comunidad enferma.

“Hacemos viajes experienciales en Eposak. No es solo conocer el destino sino tener una experiencia de inmersión en la comunidad, así entiendes sus problemas, económicos, sociales, educativos, de salud. En el caso de Kamarata, entiendes el impacto de la minería ilegal, la prostitución, el crimen. La gente entiende todos estos problemas de raíz, se conecta mucho más y así se logra que decidan ayudar después”.

Eposak trabaja en las comunidades y ayuda a los emprendedores con capacitación, acceso a financiamiento y desarrollo de proyectos.

“Por ejemplo, ahora tratamos de surtir con paneles solares al colegio y al dispensario de Kamarata. Si el colegio no tiene electricidad no funcionan ni la luz, ni la computadora. Cuando el dispensario no tiene electricidad las medicinas se pudren. Si el colegio y el dispensario no funcionan la comunidad colapsa”.

Replicar la experiencia

El financiamiento de ese proyecto se logró con la plataforma de crowfunding, es decir la gente donó 100% de los recursos requeridos. Torbar afirmó que la idea es replicarlo en muchas más comunidades. “Hay otro proyecto para construir centros culturales en las comunidades, porque hay quienes desean hacerlo, hay gente que se entusiasma y financia el desarrollo de estos lugares, nosotros somos un puente, trabajamos con las posadas existentes y nos aliamos con ellos para cuando lleguen los turistas les podamos unir estas experiencias”.

Otra comunidad en la que la visión turística experiencial está teniendo un ejemplo transformador es Birongo. “Estamos ahí desde 2012, es un sitio totalmente distinto a Kamarata porque queda en la montaña de la costa, ahí todo el mundo tiene una sonrisa de oreja a oreja, los tambores son el alma, el sonido y el cuerpo de la comunidad, pero también tienen muchos problemas, está muy dividido, con distintas inclinaciones y visiones de país. Sin embargo, hemos visto como a través del turismo todos se han juntado. El turismo ha demostrado que es capaz de juntar a gente de visiones distintas en muchos aspectos”.

El empresario también dijo que recientemente llegaron a Choroní, en Aragua. “Es mágico, hay muchas casas espectaculares, hay tradiciones, cultura, una joya de líderes comunitarios que pueden hacer que todo eso y que el poblado vecino, Chuao, se mantenga con un potencial turístico gigantesco”.

Abrazar el turismo

Aseguró que Eposak no se ha extendido a otras comunidades porque aún no están dadas todas las condiciones necesarias para el trabajo.

“Una de las condiciones necesarias para trabajar en las comunidades es que éstas quieran abrazar el turismo, que se organicen alrededor del turismo. Si ellas no lo quieren se van a encontrar muchas trabas. Cuando comenzamos en Kamarata hubo problemas porque éramos totalmente ajenos, extraños. Una vez nos ganamos la confianza, ya tuvimos eso como carta de presentación”.

El sueño del empresario es poder estar en más comunidades ubicadas al sur del país como Sari Sariñama, Yunek, Maniapure, y poder hacer alianzas con gente de todos estos lugares. “Sueño con poder estar en unas 20 comunidades en Venezuela, con encontrar líderes comunitarios que abracen al turismo, que sirvan de inspiración y de ejemplo para todos los demás y que sean agentes multiplicadores de lo que es posible con el turismo”.

Aseguró que el turismo no se construye con presionar un botón, con montar hoteles o tener aviones, se necesitan líderes, gente que inspire y que procure hacer las cosas bien para poder ofrecer un buen servicio. “En las mejores posadas de Venezuela, cuando le preguntas a la gente qué es lo que más les gusta del lugar, responden que es el servicio, luego hablan sobre la belleza. La gente necesita saber que el servicio es bueno y eso se logra con inspiración”.

Incentivar para desarrollar

Torbar está convencido de que son las comunidades las que se forjan su visión de futuro. “El peor error es intentar imponer un modelo de desarrollo, éste tiene que partir de la comunidad. Si vas a desarrollar Los Roques, tienes que ver cómo se ven ellos, cuál es su modelo de desarrollo. Si hay consenso comunitario el modelo es dos veces más poderoso y así es como se ha hecho en la mayoría de los casos”.

“También nos hemos dado cuenta que la gente necesita que alguien les dé la oportunidad y apueste en ellos. Si hay turistas, ferrys, aeropuertos y carreteras funcionales, tengo incentivos para hacer mi posada”, indicó.

Agregó que han aprendido mucho de los criterios de la Asociación Mundial de Turismo y el Global Sustainable Tourism Council que se han puesto en práctica en otras partes del mundo. “Han sido muy útiles, pero nos dimos cuenta en el camino de que no todo puede ser tomado de ahí, hay criterios que son muy venezolanos, somos únicos en el mundo”.

Torbar señaló que una de las cosas que mueven el camino del emprendimiento es que haya un atractivo turístico importante, lo que no significa que deba haber la mejor playa o montaña. El mejor ejemplo es Birongo. “Es un sitio raro, en el medio de la montaña pero con una riqueza cultural espectacular, eso es importante. La comunidad tiene que estar dispuesta a abrazar el turismo y organizarse”. Ese liderazgo es vital para inspirar el proceso.

La mujer, el motor

Torbar resaltó la necesidad de que haya emprendedores con experiencia, para hacer proyectos que funcionen. “Si apoyas proyectos que no funcionan lo que muestras son fracasos y lo que deseas exhibir son proyectos exitosos”.

Otro factor diferencial y fundamental en el proyecto que ha impulsado Torbar es la presencia de la mujer venezolana. “Es impresionante en todos los proyectos que hemos tenido, donde se ha brindado apoyo financiero, todas las mujeres han devuelto los préstamos. En 98% de los casos, las mujeres llevan el proyecto adelante y no lo dejan a medias, son las que sirven de ejemplo. Obviamente hay excepciones, pero nos han impactado”.

El empresario agregó que el turismo empodera a la mujer, pues es socialmente inclusivo y le da una gran posibilidad de desarrollo.

Vista al futuro

Torbar explica que el turismo que se está viendo en Venezuela es mayoritariamente interno por la realidad del país.

“Al venezolano, cuando le presentas una realidad social, lo sensibilizas enormemente. Llega a un pueblo y la pasa buenísimo. Llega a Birongo y se va para una cueva, llega a Kamarata y escala la montaña o va para las cascadas, ve la belleza natural del sitio, en Choroní va para la playa y de repente le muestras cómo vive la gente y eso crea un impacto increíble”.

Torbar asegura que uno de los grandes valores del venezolano es la solidaridad. “La gente se sensibiliza y dice ‘oye yo quiero ayudar’, se conectan y terminan queriendo ser un elemento que ayude a la transformación que quieren ellos”.

Esa prueba hecha con turistas nacionales, también ha sido realizada con viajeros internacionales pero con las limitaciones de vuelos y otros tantos temas que no escapan de la crisis venezolana.

Conexión y arraigo

“Hemos tenido muchas experiencias con venezolanos que están afuera y vienen. La conexión es increíble. Es necesidad de estar arraigado, de decir yo si quiero estar aquí, uno ve cuando se viaja por el mundo que se construye la Venezuela fuera de Venezuela, ves a todos montando una arepera, una tienda de artesanía venezolana, promoviendo el país, la gente de afuera, todos quieren estar aquí”, sentenció.

“Todos se han ido por razones que no se pueden criticar, cada quien tiene sus motivos, pero todos quieren estar aquí. También los que se van extrañan dos cosas principalmente. Extrañan la belleza, la montaña, las playas, pero lo que más extrañan es a la gente, afuera no se extraña un pozo petrolero o las tiendas o fábricas o el sector industrial, ni los sistemas, es lo emocional, esas cosas que los unían a Venezuela”, dijo.

Torbar agregó que se está construyendo, sin quererlo, la mayor fuerza de ventas de Venezuela en el mundo. “El día que Venezuela agarre un camino adecuado todo estos 3,5 o 4 millones de personas que están afuera van a ser los principales vendedores del país, van a decirle a todo el mundo que venga. Creo que nos hicieron un atajo para que, en la reconstrucción, el turismo se repotencie, inicialmente con los venezolanos y luego con los extranjeros”.

La apuesta

“Rechazo cada vez que se dice que no se puede porque no hay actitud de servicio, estoy convencido de que tenemos a la gente más amigable y extraordinaria del mundo, soy un firme creyente de ese proceso y así he ido apostando a la hotelería, a otras iniciativas. Sigo apostando a la infraestructura, a crear más redes de emprendedores y vendedores y a lograr inspirar que la gente quiera emprender y meterse en ese mundo”, dijo.

“Venezuela es un país inmensamente rico en experiencia sobre todo, no solo en belleza sino en cosas que te conectan y el mundo del turismo se está yendo a ese turismo experiencial que te deja algo”, expresó.

El empresario afirmó que en 10-15 años Venezuela va a ser una potencia. “Margarita va a ser una potencia, vamos a pasar de los menos de 180.000 empleos a más del millón en el área turística en Venezuela- Sí veo al país con 4 o 5 millones de turistas y en el mapa turístico mundial pero va a tomar tiempo. Es el momento y es la oportunidad como nunca antes. La historia nos está dando un momento privilegiado”.

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