El banco, que en sus reportes había dado poca importancia a la posibilidad de una cesación de pagos el año que viene, ahora teme que el colapso del mercado petrolero pueda poner en riesgo incluso los vencimientos de febrero de 2016.
«Sin una recuperación rápida de los precios del petróleo en los próximos meses, la contracción aún mayor de las importaciones o el uso de los activos disponibles sería insuficiente para evitar el default, desde nuestro punto de vista», señala la firma en un informe divulgado este viernes.
Barclays calcula que, con una cotización promedio de $47 por barril, los ingresos por exportaciones del país se ubicarían en $30 mil millones en 2016, un declive de $9,3 mil millones con respecto a los de este año. Incluso con un recorte de importaciones de $7 mil millones, el gobierno todavía tendría que cubrir un déficit de $27 mil millones en su flujo de caja.
La firma contempla un escenario base en el que el gobierno podría recibir $6,7 millardos en financiamiento, alrededor de $1.000 millones provenientes del pago anticipado de la deuda de Petrocaribe y ahorrar máximo $3 mil millones por recompra de bonos a través de entes públicos. No obstante, sería necesario extraer $20 mil millones de sus propios activos para honrar sus compromisos. «Esto llevaría los activos por debajo de lo que consideramos niveles mínimos operacionales», indica el texto.
Para el banco, hasta los pagos del primer trimestre del año que viene están en riesgo. «Si el gobierno cree en la posibilidad de una recuperación rápida de los precios del petróleo podría pagar los vencimientos de febrero 2016 usando las reservas de oro del Banco Central de Venezuela», explica el reporte.