La presidenta de la ONG Control Ciudadano, Rocío San Miguel, analizó la reacción de los militares en la parada del pasado 4 de agosto, luego de la detonación de dos drones cargados de explosivos, cuyo objetivo era presuntamente asesinar al presidente Nicolás Maduro, y describió la actuación de la Fuerza Armada como una "vergüenza" para la institución castrense
«Las fuentes de orgullo militar en las Fuerzas Armadas de cualquier país del mundo suelen ser muy claras y el heroísmo probablemente sea el valor universal más destacado, por lo cual la cobardía y el miedo son inadmisibles en sus códigos de honor», opinó en un artículo publicado en la ONG que lidera.
San Miguel consideró que lo ocurrido el pasado 4 de agosto fue «lamentable», sobre todo, para soldados que se definen a sí mismos «como herederos de la gesta de Bolívar», y se escudó en el artículo 10 de la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional vigente (2014) que reza:
“No puede ser militar el cobarde, el que carezca de dignidad, pundonor, ni el de relajada conducta, pues mal puede ser guardián de la libertad, honra e independencia de su Patria, quien tenga miedo al sacrificio y ultraje sus armas con infames vicios”.
Criticó además que nadie tomara el liderazgo de la situación: el Ministro de la Defensa, el militar activo con más soles en el país, «salió empujado» y fue Jorge Rodríguez, ministro de Comunicaciones y un civil, quien dio ordenes a la Guardia Presidencial.
«Segundos más tarde, pudo apreciarse una desbandada de soldados que se encontraban en la parada militar, producto del pánico que creó la huida presidencial (…) fuimos testigos, los venezolanos, de una reacción militar insólito», escribió San Miguel.
No obstante, exculpó a los cadetes y soldados que salieron despavoridos porque, a su juicio, «no han sido preparados para una situación semejante» y se trató de una reacción «natural», aunque evidencia que «en su vocación no está la de convertirse en escudos humanos o «escudos de amor»», como los llamó el presidente Maduro luego del incidente.
Por otro lado, contra argumentó al ministro de comunicaciones quien indicó que a la tropa se le ordenó dispersarse.
«Es bueno recordarle, que las tropas no se retiran a la desbandada. Incluso ante una emergencia se conducen en formación, hasta las áreas que deben estar previstas a tal fin».]]>
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