Venezuela

10 de enero agrava crisis de Venezuela y eleva presión sobre el chavismo

Llega el 10 de enero, Día D para la política venezolana, y tal como en el famoso desembarco de 1944 a las costas francesas fue determinante para liberar a Europa de las garras del nazismo, ahora empieza un nuevo período gubernamental en medio de una diatriba política que ya se expande allende las fronteras venezolanas sobre la legitimidad del actual gobernante Nicolás Maduro.

Nicolás Maduro gobernante de Venezuela
Foto: Archivo El Estímulo
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Mucho se ha hablado sobre la situación política que, tanto el Ejecutivo como los ciudadanos de Venezuela, enfrentarán tras la juramentación que no se hará como es de debido ante la Asamblea Nacional.

El oficialismo señala que este cuerpo está en desacato, por lo que debe ser disuelto. Por esta razón la juramentación de Maduro será ante el Tribunal Supremo de Justicia.

La perspectiva sobre lo acontecido con los comicios del 20 de mayo de 2018 varía desde el completo respaldo de los aliados al gobierno de Maduro, a una neutralidad o tímido apoyo, y al señalamiento de vicios por parte de la oposición y la comunidad internacional.

En el continente americano la mayoría de los países afirman que el Legislativo venezolano es el único poder legítimo. Estas naciones están preparadas para no reconocer a Maduro como mandatario por la usurpación del cargo. De hecho ya han tomado inéditas medidas como impedir la entrada de funcionarios venezolanos a esas naciones y la incautación de capitales de las personas señaladas en esos países.

Sin embargo, no queda claro lo que sucederá en Venezuela si no hay reconocimiento internacional. ¿Qué implica para los venezolanos esta situación? Consultamos a tres expertos internacionalistas Edmundo González Urrutia, Oscar Hernández Bernalette y Carlos Luna. Los dos primeros embajadores de carrera y todos académicos con experiencia que explicarán lo qué se puede esperar internacionalmente respecto a Venezuela a partir del jueves.

1) ¿Qué pasa el 10 de enero diplomáticamente?

González Urrutia: Esa fecha, un buen número de gobiernos definirán su posición sobre el reconocimiento o no de Nicolás Maduro para el período 2019-2025.

Ese día vence el mandato presidencial y desaparece la legitimidad de quien fue elegido en unos comicios cuyos resultados fueron desconocidos por buena parte de la comunidad internacional por no haber sido ajustados a lo establecido en nuestra Constitución.

Hernández Bernalette: Los gobiernos que reconocen al Estado venezolano deberán decidir, como acto “libre, voluntario y discrecional”, si reconocen al nuevo gobierno que pretende instalarse a partir de esa fecha.

No hay obligaciones legales internacionales en el sentido que otros Estados deben reconocer nuevos gobiernos independientemente de su origen en el poder, sea de jure o de facto.

Para que se mantengan las misiones diplomáticas debe haber un reconocimiento mutuo y como parte de un acuerdo como lo establece la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas.

Carlos Luna: El 10 de enero hay una pérdida de la legitimidad de origen de Nicolás Maduro, alcanzada en las elecciones de 2013, un sexenio que lo llevó a asumir la presidencia hasta el 10 de enero cuando termina su legitimidad de origen porque constitucionalmente debería juramentarse ante la Asamblea Nacional, único poder legítimo establecido en Venezuela y no en ante el Tribunal Supremo de Justicia como lo hará.

Dado que un gran número de países no reconocieron el resultado electoral del 20 de mayo de 2018, Maduro no será reconocido como presidente constitucional de la República.

Además, se le agrega la pérdida de legitimidad de ejercicio o de desempeño por todas las violaciones a los derechos humanos y la emergencia compleja que vive Venezuela.

2) ¿Qué países reaccionarán con miras al 10 de enero?

González Urrutia: En el hemisferio, los países que integran el Grupo de Lima: Argentina; Brasil; Canadá; Chile; Colombia; Costa Rica; Guatemala; Honduras; Panamá; Paraguay; Perú; Guyana; y Santa Lucía. Más Estados Unidos, México –se abstuvo-, los 28  países de la Unión Europea y otros, como Suiza, que sin ser miembros de la Unión Europea, además de Japón y Australia, desconocieron los resultados de la elección del 20 de Mayo.

Además 10 países europeos se sumaron a las sanciones del bloque contra funcionarios del régimen de Nicolás Maduro ellos son Albania; Bosnia; Georgia; Islandia; Liechtenstein; Macedonia; Moldavia; Montenegro; Noruega; y Ucrania, medidas que incluyen la prohibición de ingreso a dichas naciones y el congelamiento de activos.

Hernández Bernalette: Algunos países reconocerán de hecho la toma de posesión presidencial y otros no la reconocerán por considerarla ilegítima al no cumplir los propios preceptos constitucionales sobre esa materia. Pueden darse posiciones en bloque como la del Grupo de Lima, la Unión Europea y otros individualmente.

Carlos Luna: La mayoría de los Estados americanos repulsa al Ejecutivo con excepciones contadas como las de Nicaragua, Bolivia, algunas islas del Caribe y ahora México, que se apega a la doctrina Estrada de neutralidad respecto a otros países.

Por otra parte, los Estados americanos tienen una posición casi unánime y de rechazo al gobierno de Nicolás Maduro. Esta postura se hará evidente en las reuniones de la Organización de Estados Americanos y del Grupo de Lima.

Otro punto que hay que sopesar es si Venezuela, que sale de la Organización de Estados Americanos en abril, se va de la Organización de Estados Americanos o es suspendida por la situación de inconstitucionalidad.
Maduro 10e-06

3) Previamente 46 países desconocieron los resultados del 20 de mayo y otros 38 lo reconocieron, países como México y España han variado sus posiciones hacia Venezuela luego de eso… ¿Esto influirá en la situación?

González Urrutia: Cierto que en México y España han ocurrido cambios de gobierno, pero no olvidemos que la alta representante de la Unión Europea para las relaciones exteriores, Federica Mogherini, indicó que la política de presión y sanciones a los responsables de la violencia en Venezuela no será modificada.

Hernández Bernalette: No hay posiciones estáticas y permanentes en las relaciones internacionales. Muchos países usarán la figura de la no intervención en los asuntos internos de los Estados.

De las cifras de países antes mencionadas seguramente habrá posiciones de ingeniería variable. No creo que el bloque vaya a reconocer a Maduro en su conjunto y buscará la conformación de un grupo de contacto para lograr una salida pacífica, constitucional, democrática, negociada de la situación.

Se trata de crear las condiciones mínimas para generar una negociación y abrir el canal para una transición política en Venezuela.

Carlos Luna: México tiene posición de neutralidad basada en la redición de la doctrina Estrada en la que no se interviene, ni interpone en los asuntos domésticos de otros países. A mi juicio es una lectura equivocada, anacrónica y desactualizada.

La posición española es más difícil de cambiar porque forma parte de un bloque como es la Unión Europea en la que la Alta Secretaria de Política Exterior y Defensa, Federica Mogherini es la gran coordinadora.

La Unión Europea no va a reconocer a Maduro en su conjunto y va a buscar la conformación para un grupo de contacto para lograr la negociación y un canal de transición en Venezuela.

4) ¿El caso español influye profundamente en la decisión de la Unión Europea?

González Urrutia: España tiene un papel destacado en las decisiones de la Unión Europea con respecto a América Latina y ha jugado un papel central en el diseño de la política del bloque hacia nuestra región. Así ha sido con respecto a Cuba y lo es con relación a Venezuela.

Hernández Bernalette: Influye pero no es determinante. Lo importante no es la asistencia o no sino el mensaje. La Unión Europea indicó: “Está muy claro que si la investidura de Maduro se hace ante la constituyente, los estados miembro de la Unión Europea no estarán representados y si tiene lugar fuera de la Asamblea será por debajo del rango de embajador”.

Carlos Luna: No creo influya en lo que es la Unión Europea. El caso español es de cuidado. La gobernabilidad de Pedro Sánchez no es ni la más grande ni la más fuerte dentro de los países de la Unión Europea.

En el caso de Venezuela, tiene una repercusión importante en la política doméstica. A Pedro Sánchez le interesa más mantenerse en el poder que estar dando un respaldo irrestricto al régimen de Maduro.

5) Qué puede esperar el venezolano de a pie si los países no reconocen la legitimidad de Nicolás Maduro, ¿Cambia algo en lo político, diplomático y comercial?

González Urrutia: Enfrentaremos un escenario de mayor aislamiento internacional al régimen de Nicolás Maduro, con una imagen deteriorada del país; dificultades para el acceso a fuentes financieras internacionales.

Hernández Bernalette: Nada significativo. No habrá cambios ante la ya maltrecha situación económica del país. El gobierno tendrá recursos para mantener el status quo. La economía del país no depende de relaciones económicas abiertas sino clientelares y dirigidas.

Carlos Luna: Lo que se puede esperar es que haya un incremento importante de la presión internacional sobre el régimen venezolano y sus funcionarios. Esto obviamente recortará aún más la posibilidad de importar productos de parte del venezolano que vive una situación compleja y además con la paralización del sistema productivo nacional.

Debemos también contemplar todo lo que tiene que ver con la crisis económica. Puede que haya una crisis aún más importante y una movilización de fuerzas políticas y sociales en contra del presidente Maduro que podría reaccionar de forma negativa.

Si no tiene la legitimidad, ni la aprobación del favor popular por vía de los votos para mantenerse en el poder solo cuenta con el recurso de la fuerza y quizá hasta la violación de los derechos humanos para mantenerse en el poder.

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