En su Plan Pastoral para el período 2014-2020, la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (COCC) señaló que estos cambios, relacionados con la eliminación de subsidios y la reestructuración de los empleos, son insuficientes, reseñó la agencia EFE.
En el documento, los obispos señalan que muchos cubanos «aspiran a un modelo de Estado menos burocrático y más participativo, menos paternalista y más promotor, menos autoritario y más democrático».
Refiere que algunos ciudadanos apuestan por un modelo de nación basado en una «sociedad inclusiva, abierta al pluralismo, con instituciones que permitan procesar desacuerdos, en el que los ciudadanos y sus representantes cultiven la cultura del diálogo, del respeto al que disiente o piensa diferente».
La COCC se lamenta de que un cierto número de libertades en los medios de comunicación «se encuentra restringido», aunque reconoce que la existencia de «espacios incipientes de debate y discusión en torno al proyectos de país».
Los obispos también critican «el aislamiento» que sufre la población cubana por parte de Estados Unidos, en alusión al embargo económico, financiero y comercial que aplica el Gobierno de Washington contra la isla desde hace más de medio siglo.
En Cuba, un 60 % de la población (11,1 millones) se considera católica en referencia a la cifras de bautizados, pero la participación en la misa dominical no llega al 2 %.