¿Qué tienen en común Nicolás Maduro y Manuel Rosales?: ¿elocuencia?, ¿sagacidad?, ¿buen olfato político proponer soluciones a los venezolanos? No lo sabemos. Lo que pueden tener en común ambos políticos es que propusieron en sus respectivos momentos una tarjeta de ayuda social que ha despertado muchas suspicacias.
Al menos eso refleja la ola de comentarios en las redes sociales que este jueves posicionaron la palabra Mi Negra, para acusar a Maduro de copiarse una oferta que hizo Rosales diez años antes, cuando se midió ante Hugo Chávez en las elecciones presidenciales.
Y es que en 2006 el exgobernador del estado Zulia, ofreció a Mi Negra como una tarjeta de consumo, que en su momento fue calificada de «populista» por Chávez y el resto de quienes integraban su maquinaria electoral.
Pintada con los colores de la bandera de Venezuela, Maduro anunció el miércoles la tarjeta «Misiones Socialistas para los hogares de la patria», puede hacer los consumos en la red de abastos del Estado.
Mi Negra pretendía subsidiar los consumos de bienes básicos y servir como un instrumento bancario para adquirir las viviendas construidas por el Estado, según explicó en una ocasión Rosales.
En 2013, Maduro lanzó la tarjeta «Somos» destinada a impulsar la bancarización de los jóvenes y canalizar el pago de becas estudiantiles.