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Kim, la niña de tres años por la exigen justicia en Baja California: "Me tocaron"

Kim apenas tiene tres años. El pasado 9 de septiembre, entre lágrimas, le dijo a su mamá que le dolían sus partes íntimas. Cuando ella la revisó, le vio heridas. Su búsqueda de justicia inició ese día y esta es su historia

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«Me va a doler. No. Me va a doler. Me va a doler». Esas fueron las palabras que escuchó Dulce María Corona, una mujer mexicana de Baja California, cuando intentó acompañar a su hija Kim al baño de su casa. Lo decía llorando. Lo decía con miedo. No entendía por qué su hija de apenas tres años tenía esa reacción si en la mañana todo estaba normal: la había dejado en la escuela. Contenta. Pero ya no era así.

Con su consentimiento, Dulce revisó donde la niña le indicó que le dolía y vio lo que ocurría: Kim tenía una herida en sus genitales. Primero llamó a la maestra, quien le negó que su hija tuviera algún dolor en clase. Luego la llevó a un centro de salud y la médico que la atendió le habló con la verdad: «Se encuentra visiblemente lastimada».

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En su perfil de Facebook, Dulce contó que la doctora le recomendó estar alerta a los «síntomas de alarma»: «No quise pensar en la posibilidad de que la allan (sic) violentado sexualmente. Era mi mayor miedo. Quería buscar una respuesta, pero nadie me daba ninguna».

Un rato más tarde, Kim habló con ella el carro: «Me menciona que un maestro y una maestra le limpiaron su partesita, pero tapados para que nadie los viera. Hasta que unos niños los vieron».

Dulce intentó mantenerse fuerte y procesar la información. Actuó rápido: a las 6:00 pm de ese lunes, junto a su familia, se dirigió a la fiscalía y puso la denuncia.

Copia de la denuncia que introdujo Dulce Corona.

Desde entonces, el nombre de Kim ha dejado de ser desconocido y también su historia. Dulce ha hecho una campaña para ejercer presión y conseguir justicia. Este es un resumen de lo que ha ocurrido desde el pasado lunes 9 de septiembre con esta familia.

Kim: ¿cómo llegó la niña a la escuela?

Kim nació en octubre de 2020 y es la hija del medio de Dulce María. El 26 de agosto comenzó las clases en el preescolar Graciano Viniegra Salazar, ubicado en Mexicali, Baja California por recomendación de su familia. Un primo de la niña estudiaba allí y habían tenido una buena experiencia. Ese día inició el segundo curso de educación inicial.

Los primeros días fueron felices para ella. Su mamá, en un video que publicó en TikTok con la denuncia de su caso, lo cuenta: «Ibas tan feliz a tu escuelita. ¿Por qué hay gente tan podrida en este mundo?».

Esa dinámica de ánimo, de alegría, cambió el 9 de septiembre, cuando la niña le contó sobre su dolor y lo que había vivido. El miércoles 11 de septiembre, tras poner la denuncia en la fiscalía, Dulce fue a la escuela junto a su madre y su hermana para hablar con la profesora y la directora de la institución.

«La directora comentó que ella y los maestros acuden a los mismos baños que los niños. Lo dijo en repetidas ocasiones. Eso nos alertó muchísimo (…) ya había ocurrido un caso en el kínder anteriormente», explicó Dulce en un post de Facebook.

La madre de Kim relata que a la maestra la hicieron firmar documentos para no responsabilizar al preescolar de lo ocurrido y supo que levantaron un protocolo sobre cómo llevar estos casos. En todo momento, la docente no dijo nada.

Asistencia psicológica sin resultados

El sábado 14 de septiembre Dulce María Coronado publicó un video en TikTok que hizo el caso de su hija viral en redes sociales. En el clip, se ve una foto de su niña con el uniforme entrando a la escuela y luego se escucha un audio en el que Kim expresa lo que le pasó en la escuela entre lágrimas: «Me tocaron. Me tocaron».

La madre de la niña ha dicho en reiteradas ocasiones que Kim reconoce al hombre que la violentó sexualmente: «Él es el hombre malo que tocó mi partesita (sic)».

Ella ha guardado el testimonio de su hija en videos para darle continuidad y base legal al caso. Sin embargo, el preescolar le ha dicho a Dulce que la niña no ha querido hablar con los psicólogos que activaron para llevar el caso institucionalmente.

La vida de Kim desde el 9 de septiembre

Kim no quiere ir al baño. Se ha orinado varias veces en los brazos de Dulce. «Le da miedo entrar al baño. La tengo que bañar afuera y se me pone histérica de solo acercarla al baño. Así que es más que obvio que algo pasó», cuenta su mamá.

Por las noches, la niña se ha despertado llorando y le dice: «No me toques. No me toques».

«Esto me parte el alma porque ya no sé qué más hacer. Sé que todo esto es un proceso, pero no puedo con la desesperación de saber que esta persona siga laborando en el kínder», relata Dulce en Facebook.

Apoyo entre paredes y comunidad

Dulce María Corona ha dicho públicamente que no puede mostrar fotos del hombre que su hija señala agresor porque puede generar inconvenientes en la investigación que está en curso. La situación la ha llevado a unirse a con los padres de los niños que estudian con Kim, pues tras lo ocurrido descubrieron que no es el único caso.

Carteles de los padres que asistieron a la protesta.

Este martes 17 de septiembre organizaron una manifestación para exigir que cierre el preescolar o destituyan a la persona a cargo. La Voz de La Frontera, un medio local de Baja California, asistió al encuentro y pudo comprobar que la escuela no abrió ni asistieron los docentes.

Carteles de los padres que asistieron a la protesta.

Además, los familiares de los niños denunciaron que los vecinos del kínder han visto cómo en la madrugada entran personas a retirar cosas sin dar razones. Presumen que no quieren dejar evidencia.

El abogado que lleva el caso de Kim se llama Cuauhtémoc Castilla y expresó a La Voz de La Frontera que aún desconoce por qué el preescolar se mantiene abierto y sin resguardo de cuerpos de seguridad. También indicó que Dulce todavía no tiene una copia del expediente de la investigación y que las autoridades no han revisado las cámaras de seguridad del plantel educativo.

«Dulce informó que desconoce los avances de la investigación debido a que la Fiscalía General del Estado no me ha informado nada, ni qué fue lo que declaró su hija, ya que no la dejaron entrar con la menor cuando dio su declaración», reseñó el diario.

“Yo lo único que pido es justicia, que esté encarcelado esa persona”, dijo Dulce a La Voz de La Frontera.

El domingo 15 de septiembre, Marina del Pilar, la gobernadora de Baja California, aseguró que los docentes señalados como «responsables» fueron separados de sus cargos y que la familia de Kim contaba con su apoyo.

«Estoy en contacto con la familia de la niña, quienes han presentado la denuncia correspondiente y cuentan con todo nuestro apoyo en este proceso, para que este caso sirva como ejemplo y que nunca, nadie más se atreva a meterse contra lo más sagrado que tenemos como sociedad, nuestra niñez. ¡HABRÁ JUSTICIA!», escribió en X.

Antes de la protesta que llamaron los familiares de los niños del preescolar, la fachada de la institución ya tenía varios graffitis. «Violadores» se puede leer en las rejas, afiches y paredes.

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