Cúmulo de denuncias ilegitiman elecciones de Venezuela
Prolongación forzada del horario en centros de votación, movilización de electores con recursos del Estado, uso de agentes armados, incumplimiento de las normas de bioseguridad y hasta un repentino e insólito cambio de centro para Nicolás Maduro forman parte del cerro de irregularidades registradas en los comicios legislativos del 6D
Como era de esperarse, un cúmulo de denuncias se apila encima de las elecciones legislativas de ayer, 6 de diciembre, en Venezuela.
Estas elecciones fueron cuestionadas desde el principio por la comunidad internacional y por la oposición política. La expropiación de los tradicionales partidos opositores por parte de magistrados chavistas y su entrega a falsos competidores, la anulación política de fuertes rivales de oposición y la falta de observadores internacionales imparciales fueron algunos de los elementos por las que no se les reconoció como una votación legítima ni por las que no participaron opositores reales.
Ahora se suman otras denuncias sobre irregularidades en el mismo proceso del sufragio. Porque, incluso con unas elecciones diseñadas a la conveniencia del gobierno de Nicolás Maduro, no pudieron cumplir con los protocolos electorales.
Apertura irregular de centros electorales
Esta vez no les hizo falta incurrir en irregularidades para ganar (como se denunció en otras elecciones) pero sí para aumentar el índice de participación. La abstención final fue altísima, de 69 %, a pesar de la campaña para incentivar el voto que hizo personalmente Nicolás Maduro y todos sus funcionarios. Pero era mucho más alta, cercana al 82 % según la verdadera oposición, apenas una hora antes del cierre formal de los centros electorales.
Fue entonces cuando ocurrió la irregularidad mayor: dejar abiertos una hora más los centros electorales, que no tenían cola, para activar la maquinaria de movilización de electores. Esto quiere decir para que el gobierno de Maduro obligue a la gente a salir de sus casas para votar. La amenaza es dejar de recibir los bonos y la caja de alimentos subsidiada.
La ley electoral venezolana solo permite prolongar la apertura de centros electorales solo si hay filas de votantes afuera. No era el caso.
La organización Súmate vigiló todo el proceso y reportó que 89,85% de 2.043 centros de votación en el país no tenían colas después de las 6pm pero que el 80,51% de ellos permanecieron abiertos después de la hora de cierre, lo que viola el artículo 121 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales.
Añadieron que en el 49,97% de los 2.043 centros de votación, los jefes de la repartición de las cajas subsidiadas de alimentos CLAP acompañaban a los electores para confirmar que votaban, incluso después de las 6 pm, hora de cierre.
Ocurrió en extensión de horario para cierre de Centros de Votación hoy en elección #6D. Esto es coacción, amedrentamiento, intimidación por estructuras gubernamentales para obligar a electores a votar por @PartidoPSUV. Viola la Constitución (Art. 63) y #LOPRE (Arts. 126 y 217). pic.twitter.com/53mI03uob7
La agencia EFE también constató la irregularidad durante un recorrido por los centros electorales. Observó cómo un centro del municipio Libertador que estaba sin electores a la hora del cierre mantuvo sus puertas abiertas durante horas y recibió a una votante pasadas las 10 de la noche.
El Observatorio Electoral contra el Fraude, afiliado a la Asamblea Nacional opositora, sumó otras denuncias. Aseguró que «80 % de los venezolanos le dijo no al fraude». También que fue más alta que cuando la Asamblea Constituyente. Juan Guaidó aseguró que la abstención fue de 82%.
La irregularidad de mantener forzadamente los centros electorales abiertos fue refrendada incluso en televisión por Jorge Rodríguez, alto funcionario del gobierno de Maduro:
Esto es falso. Vicepresidente del @ve_cne Leonardo Morales solo informó que se extendía hasta las 7pm en centros de votación con cola de electores https://t.co/R1mkWtp6rc
La presencia armada, formal o irregular, fue otra constante en las polémicas elecciones de ayer 6 de diciembre.
La organización Súmate registró presencia de grupos armados o violentos en sus alrededores intimidando y coaccionando a electores en 25,6 % de los 2.473 centros de votación.
Además, certificaron que en 26% de los centros se movilizó a electores usando a la Fuerza Armada después de las 6 pm, hora formal de cierre. Y en 35,79 % ocurrió lo mismo pero usando bienes del Estado.
Opaco proceso y turbio conteo
Eugenio Martínez alertó, durante varios días previos, de la poca transparencia informativa que rodeaba al proceso del 6D. Sin embargo, ayer certificó que no existía certeza «que las 29.622 máquinas de votación que el CNE dice que desplegó funcionaron durante la jornada».
Añadió que «reportes preliminares sugieren que al menos 3 mil máquinas (mesas) no han sido activadas. Se desconoce si en estos casos se pasó a manual».
Súmate, por su parte, aseguró en sus denuncias lo siguiente: en 87,32 % de 2.043 centros de votación impidieron el acceso a los ciudadanos al acto de verificación Ciudadana; en 87,57% impidieron el acceso a los ciudadanos al acto de escrutinio; en 24,36% de 264 centros de votación en el país no imprimieron las actas para los testigos y miembros de mesa, violando los procedimientos establecidos en la ley y en 49,56% de esos centros se realizó el sorteo para la verificación ciudadana antes de la impresión de las actas, violando procedimientos legales.
El covid salió a votar
Un elemento adicional se sumó a los protocolos electorales este 2020. Es la bioseguridad contra la covid-19 porque el coronavirus sigue circulando.
Las ansias de aumentar la participación hicieron que, incluso sin portar ninguna mascarilla, se permitió la participación de los electores, como constató El Estímulo en un centro electoral de La Pastora, al oeste de Caracas.
Pero Súmate observó que, en muchos centros, ni siquiera los funcionarios utilizaban mascarillas o procuraban el distanciamiento social.
«En 33,19 % de 264 centros de votación, los funcionarios electorales no usaron correctamente el tapabocas en prevención por covid-19 durante los actos de escrutinio y verificación ciudadana», escribieron junto a otras denuncias.
El porcentaje fue peor en el caso del distanciamiento social. «En 47,58% de 264 centros de votación no se respetaron medidas de distanciamiento físico durante actos de escrutinio y verificación ciudadana».
Un insólito cambio de centro de votación
De todas las denuncias, quizás la más insólita tuvo como protagonista al mismo Nicolás Maduro.
Maduro siempre ha votado en el liceo Miguel Antonio Caro, de Catia, que es el mismo colegio donde sufragaba Hugo Chávez. Pero ayer no quiso ir hasta el oeste de la capital y decidió votar en un centro electoral dentro de Fuerte Tiuna, el complejo militar donde vive. Pues el Consejo Nacional Electoral lo cambio de centro en ese mismo momento.
Así lo reflejó en su cuenta de Twitter, con pruebas, Eugenio Martínez:
Inaudito. El CNE actualizó el centro de votación de Maduro mientras votaba. A las 10am aparecía en la web del CNE (que incluye el corte definitivo del RE) aparecía como votantes (al igual que en 2018) en el Liceo Miguel Antonio Caro, ahora aparece como elector en Fuerte Tiuna pic.twitter.com/vDdBVXphws
Reconoció que, respecto a otros comicios, hubo mejoras, pero exhortó a superar las "graves deficiencias" y a reactivar, lo antes posible, el diálogo con la oposición
En sus inicios, el proceso electoral no era democrático siquiera en la apariencia y tampoco faltaban episodios de fraude o violencia que desvirtuaban la expresión de la voluntad ciudadana.
Son nueve los opositores que aspiran a la alcaldía de ese municipio caraqueño. El recién creado partido Fuerza Vecinal propone elegir con el voto a uno solo