Ubicados en una estructura metálica de 42 metros de altura, la tribuna de uno de los fondos están literalmente en el exterior del resto del recinto circular. El Ekaterimburgo Arena es el estadio más oriental de los que albergarán partidos del Mundial ruso (14 junio – 15 julio), y cuenta con capacidad para 35.000 espectadores, cumpliendo así las exigencias mínimas de la FIFA.
La construcción había suscitado multitud de críticas, sobre todo por cuestiones de seguridad, pero dos días después del partido que sirvió de prueba el domingo, el responsable de seguridad de la primera división rusa, Alexander Meytin, tranquilizó a los aficionados sobre la solidez de la estructura.
«Teníamos preocupaciones respecto a Ekaterimburgo», reconoció este martes ante los periodistas. «Fue la primera vez que usamos las tribunas temporales y todo salió bien».
«Los aficionados estaban ubicados con seguridad y las tribunas no vacilaron con el viento», subrayó.
Luego del Mundial, esas tribunas serán desmontadas, devolviendo al estadio su capacidad de 23.000 localidades.
Esas localidades serán las más baratas, y estarán reservadas a los aficionados rusos… que no tengan temor a las alturas.
El Ekaterimburgo Arena albergará entre otros el Egipto-Uruguay, el Francia-Perú, y el México-Suecia de la primera fase.]]>