Diablos Rojos de México y un título obtenido, gracias al aporte de los venezolanos en la LMB
El equipo azteca se reforzó con seis nativos, en distintas posiciones, para romper una sequía de 10 años sin título
El equipo azteca se reforzó con seis nativos, en distintas posiciones, para romper una sequía de 10 años sin título
Previo al inicio de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP) varios peloteros criollos llegarán a esta competencia con el ritmo de competencia a millón, luego de sus actuaciones en otros campeonatos.
El vivo ejemplo estuvo en la Liga Mexicana de beisbol (LMB) que acaba de concluir con el título de los Diablos Rojos de México, novena en la que estuvieron cinco jugadores venezolanos, aparte de dos más cumplieron roles importantes en la sabermetría y análisis de datos.
Los peloteros Erick Leal, José Pirela, Franklin Barreto, Ramón Flores, José Rondón y José Briceño fueron llamados por el cuerpo técnico para servir como refuerzos a un equipo que desde el inicio apostó por armar un trabuco encabezado por el as grandeliga, Trevor Bauer.
Los seis tienen gran opción de jugar durante la temporada 2024-2025 en Venezuela; luego de esta buena presentación en la competencia mexicana
El campeonato fue diseñado desde la temporada fría, en la que poco a poco fueron armando un equipo que tuvo como objetivo este título, tras 10 años sin poder lograrlo en esta Liga.
EL REY ESTÁ DE VUELTA, JUEGO A JUEGO #HicimosH1S7ORIA, GRÍTENLO CON NOSOTROS, SOMOS CAMPEONES DE LA LIGA MEXICANA DE BEISBOL 🏆👑 pic.twitter.com/osP3QY3Ipd
— DiablosRojosMX (@DiablosRojosMX) September 10, 2024
Diablos Rojos le barrió la final 4-0 a Sultanes de Monterrey, después de ganar 71 juegos en la ronda regular y despachar a Pericos de Puebla y Leones de Yucatán, supieron regresar de una serie 0-3 ante los Guerreros de Oaxaca, para luego ganar la Serie del Rey.
La cuota venezolana estuvo compuesta por un lanzador, tres outfielder, un utillity y un receptor que fueron parte del bien armado equipo mexicano.
Erick Leal finalizó con registro de 8-1 en la ronda regular, 95 ponches y efectividad de 2.95. Fue el pilar en la rotación roja junto Bauer, quien terminó invicto en la ronda regular con 10-0. Entre ambos ganaron 18 juegos.
En la postemporada, Leal terminó con 3-1 y efectividad de 4.45. El lanzador se alista ahora ser parte de los Leones del Caracas.
José Pirela terminó con average de .333 en la ronda regular. A ello se suman dos jonrones y 11 carreras impulsadas. En la postemporada, el jardinero zuliano largó seis vuelacercas y bateó 21 hits en 63 turnos.
Franklin Barreto fue uno de los jugadores más ofensivos con .343 de average con 19 dobles, 4 triples y 16 jonrones y 63 carreras impulsadas. Su ritmo se mantuvo en la postemporada con 9 dobles, 2 triples y 2 jonrones.
Ramón Flores fue un jugador que cuando le tocó aportar lo hizo con creces. Su average de .323 lo demuestra en la ronda regular al batear 16 dobles, un triple y un jonrón.
El jardinero de los Bravos de Margarita en la LVBP terminó con promedio de .323 en la ronda regular tras batear 16 dobles, un triple y un cuadrangular.
José Rondón dio su cuota al ligar average de .236 con ocho dobles y nueve jonrones. En una temporada larga en la que Diablos Rojos debía tener alternativas, Rondón fue una de las mejores.
José Briceño fue uno de los receptores del equipo rojo. Aunque no lució mucho a la ofensiva, al ligar .204 como el segundo cátcher, fue importante con sus 5 tubey y 12 carreras impulsadas.
El aporte venezolano no solo estuvo en el terreno de juego. También profesionales en la materia como Octavio Hernández y Leo Mendoza tuvieron un rol importante en el análisis de datos, estadísticas entre otros, para la confección de este equipo.
Tras este campeonato, se espera que para el año próximo repitan la base de este conjunto, en vista del dominio total que tuvo en la LMB, una de las dos principales y más importantes del Caribe.
La novena azteca aún celebra por todo lo alto el título, mientras que los venezolanos se alistan para ver acción en sus respectivos equipos que lucharán por un título en Venezuela entre octubre y enero.