Los mayores aumentos al precio del combustible en años -de 20,1% a las gasolinas y 16,5% al diésel- entraron en vigor el domingo en el marco de una política de liberación de precios.
Desde entonces, en una ola de ira se sucedieron manifestaciones que se agravaron el miércoles con bloqueos, saqueos a tiendas y actos vandálicos en gasolineras.
Ese día, se generaron daños en un estimado de 800 pequeños y medianos comercios del país, además de 250 tiendas departamentales, dijo el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Enrique Solana.
Este jueves, la situación se tranquilizó en Ciudad de México, pero la mecha del caos por el llamado «gasolinazo» cundía en varias regiones del país.
En Hidalgo (centro), pobladores del municipio de Ixmiquilpan realizaron «agresiones con petardos y piedras», así como «bloqueos con objetos y vehículos», indica un comunicado de la Secretaría de Seguridad Pública local.
Policías estatales y federales «hicieron uso de gas lacrimógeno, sin embargo los manifestantes no se replegaron y continuaron con las agresiones, escuchándose detonaciones de arma de fuego en el lugar», añade el reporte, que da cuenta de ocho civiles y cinco uniformados lesionados, aunque no precisa si las lesiones fueron por balas.
Mientras, en Monterrey (noreste), una importante ciudad industrial, más de 10.000 personas salieron a las calles en una protesta pacífica que degeneró cuando un grupo de jóvenes anarquistas hicieron destrozos al palacio de gobierno.
Los jóvenes, muchos de ellos encapuchados, quebraron tres vitrales del recinto y lanzaron cohetes para intentar provocar un incendio en el interior, mientras policías antimotines fueron desplegados en el lugar.
En estos hechos resultaron heridos dos reporteros, informó a la AFP el vocero estatal de Seguridad, Aldo Fasci, quien añadió -sin mayor precisión- que hubo «varias detenciones» y «un par de personas lesionadas».
En imágenes transmitidas por la televisora Milenio se observaba a policías del estado norteño de Coahuila dispersar a decenas de manifestantes con gases lacrimógenos.
– Un «cambio difícil» –
En un mensaje especial, el presidente Enrique Peña Nieto dijo que la subida de los precios de combustible resulta del alza en los precios internacionales y que es «un cambio difícil» pero necesario para garantizar la estabilidad económica.
«Mantener un precio artificial de la gasolina en 2017, como el que teníamos en diciembre, habría significado un gasto adicional de más de 200.000 millones de pesos» (más de 9.000 millones de dólares), lo que habría recortado importantes servicios públicos de salud, educación y combate a la pobreza.
«¿Qué hubieran hecho ustedes?», preguntó el mandatario, que impulsó la reforma energética de 2014 con la que se abrió el sector a la inversión privada, con la promesa de que bajaría el precio de los combustibles.
«¡Abajo la Reforma Energética!», señalaba una pancarta enarbolada por una mujer durante una protesta en el Estado de México (centro), donde hubo 430 detenidos por actos vandálicos.
– Redes sociales y vandalismo –
El miércoles, un uniformado murió tras ser «atropellado al impedir un robo en una gasolinera», mientras que otro resultó herido de gravedad en otro incidente, informó la policía de Ciudad de México, que dio cuenta de 106 detenidos.
Ese día, mientras las calles de la megaurbe lucían semivacías y eran sobrevoladas por helicópteros policiales, 20.000 pequeños negocios cerraron por temor, lo que causó pérdidas de unos 2,4 millones de dólares, dijo Humberto Lazcano, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la capital mexicana.
Este jueves, la Policía Federal reforzó su presencia en varios estados y realizó operativos en carreteras de todo el país para desarticular los bloqueos que se seguían registrando.
Además, la División Científica de la Policía Federal investigará «el origen de los mensajes en las redes sociales que incitaron a grupos de personas a realizar actos vandálicos y saqueos en diversos comercios», indica un comunicado de la corporación.
En Veracruz (este), se registraron masivos saqueos a tiendas departamentales de tres municipios que dejaron 135 detenidos.
El secretario local de Seguridad Pública, Jaime Téllez, explicó que entre los detenidos se encuentra uno de los autores intelectuales, quien a través de su página de Facebook convocó a la población a participar e incluso transmitió en vivo uno de los saqueos.
En el vecino estado de Puebla, varias tiendas cerraron ante el temor de ser vandalizadas y medio centenar de jóvenes saquearon un supermercado, llevándose pantallas, juguetes, pan y hasta papel de baño sin oposición del personal a este robo, que también había sido convocado en redes sociales.