La profanación de tumbas, sobre todo en el Cementerio General del Sur en Caracas, es un secreto a voces. Es lugar ideal para los paleros, quienes encuentran en el fondo de los sepulcros los restos de su protector oscuro
La Fiscalía venezolana informó el 22 de octubre de la detención de cuatro personas a las que acusa de profanar tumbas y simular las cremaciones de al menos 18 cadáveres, una operación que se hacía a través de un crematorio en el estado de Cojedes (oeste) y una funeraria en Caracas.
El secretario general de Gobierno del estado Zulia, Lisandro Cabello, informó que funcionarios policiales detuvieron a dos sujetos vinculados con la profanación de tumbas para luego vender huesos y el mármol de las lápidas.
El Cementerio General del Sur es el camposanto más importante de Caracas, la malograda capital de Venezuela. Ocupa unas 246 hectáreas en la parroquia Santa Rosalía del municipio Libertador. Fue fundado en 1876, por el entonces presidente Antonio Guzmán Blanco y en estos 141 años de su funcionamiento, no se sabe a ciencia cierta cuántas personas han sido sepultadas en sus instalaciones. Este terreno dispuesto para las inhumaciones, colinda con la avenida principal de El Cementerio, así como con las urbanizaciones Los Castaños, Los Carmenes y con los barrios Primero de Mayo, Las Quintas, Los Alpes y El León, considerados zonas rojas por su alto índice delictivo.