En ese lugar se hace triaje de de los inmigrantes que llegan a Amazonas. Allí ofrecen alimentación y abrigo, vacunas e instalaciones sanitarias a la comunidad de venezolanos en estado de necesidad extrema. Muchos perdieron documentos y escasas pertenencias.
La ministra brasileña de la Mujer, Familia y Derechos Humanos, Damares Alves, pidió a las iglesias evangélicas, muchas de ellas "millonarias", que acojan a los inmigrantes venezolanos que en un masivo éxodo llegan todos los días huyendo de la crisis de su país.
Los venezolanos encabezaron en 2018 las estadísticas de refugiados que obtuvieron permiso para trabajar en Brasil, según datos presentados este miércoles por el Ministerio de Justicia.
Otros 278 venezolanos serán trasladados esta semana del estado fronterizo de Roraima a seis ciudades brasileñas como parte del proceso de "interiorización" del gobierno para atender a los inmigrantes que llegan a Brasil huyendo de la crisis en su país, informaron fuentes oficiales.
Cientos de venezolanos recorren un trayecto superior a las ocho horas hasta llegar a Santa Elena de Uairén, en el municipio Gran Sabana en el sur de Bolívar, para comprar alimentos. Ha sido la dinámica de los últimos meses, pero en este periodo también se ha acrecentado la migración masiva de personas, en busca de trabajo y mejores condiciones de vida, hacia el norte de Brasil.