Fotografías de la tumba comenzaron a aparecer en redes sociales el domingo. Tenía el nombre de Trump, con su año de nacimiento y la fecha de defunción en blanco.
También incluía un mensaje, a modo de epitafio, que decía «Hagamos que Estados Unidos odie de nuevo», en referencia al lema «Hagamos a Estados Unidos grande de nuevo», que viene usando en su campaña por obtener la candidatura presidencial republicana.
Fue colocada en un sector de Central Park, pero, según la cadena NBC, la lápida fue retirada anoche del lugar, sin que se tenga información sobre quién puede ser el responsable del hecho.
El pasado 17 de marzo, uno de los hijos del magnate inmobiliario, Eric, recibió en su vivienda de Nueva York un sobre con una sustancia sospechosa, que no resultó peligrosa, y que incluía una carta con amenazas a su familia.
El hallazgo de la lápida se conoció coincidiendo con el nacimiento de otro nieto de Trump, el octavo y el tercer hijo de Ivanka Trump, de 34 años, casada con Jared Kushner.
El bebé, Theodore James Kushner, nació el domingo por la tarde en un hospital no especificado por la familia, que distribuyó fotos de la madre y del recién nacido.
Ivanka es vicepresidenta ejecutiva de la Organización Trump y ha venido acompañando a Donald Trump, junto con otros miembros de su familia, en la campaña electoral que lanzó en junio del año pasado para intentar llegar a la Presidencia de EE.UU. EFE