«El Gobierno de Ecuador suspendió los sistemas que permiten a Julian Assange comunicarse con el exterior desde la embajada ecuatoriana en Londres», informó hoy la Secretaría de Comunicación en una nota de prensa en la que afirma que la decisión comenzó a aplicarse el martes.
El Gobierno de Lenín Moreno argumenta que «la medida fue adoptada ante el incumplimiento por parte de Assange del compromiso escrito que asumió con el Gobierno en diciembre de 2017 por el que se obligaba a no emitir mensajes que supusieran una injerencia en relación a otros Estados».
Después de sucesivas peticiones por parte de la Cancillería ecuatoriana, Assange volvió a manifestarse sobre cuestiones políticas que afectan a otros países el pasado lunes, cuando criticó por Twitter la decisión del Gobierno británico de expulsar a diplomáticos de Moscú en respuesta al envenenamiento del espía doble ruso Serguéi Skripal.
«A pesar de que es razonable que Theresa May (primera ministra británica) piense que el Estado ruso es el primer sospechoso, hasta ahora las pruebas son circunstanciales», sostuvo el activista sobre ese crimen, cometido en suelo británico.
En ese sentido, el Gobierno de Ecuador advierte que «el comportamiento de Assange, con sus mensajes a través de las redes sociales, pone en riesgo las buenas relaciones que el país mantiene con Reino Unido, con el resto de los Estados de la Unión Europea y otras naciones».]]>