La Dirección Nacional de Epidemiología, del Ministerio de Salud, envió a las sedes regionales un comunicado, al que tuvo acceso El Estímulo, en el que advierte que el lote N° 3B160528 de solución de cloruro de sodio al 0.9%, de la marca china Meheco, está contaminado con la bacteria Acinetobacter spp.
«Se ha venido registrando la presencia de casos de bacteriemas en pacientes hospitalizados, asociados al uso de solución de cloruro de sodio al o,9%. El estudio bacteriológico preliminar del producto evidenció la presencia de Acinetobacter spp, sensible a ceftazidimina, aztreonam, cefepime, ciproflozacina y gentamicina. Resistente a ampicilina sulbactam».
En el informe, firmado por Ángel Andrés Melchor Salinas, director de Epidemiología, aseguran que varias muestras del lote fueron enviadas al Instituto Nacional de Higiene Rafael Rangel para ser evaluadas.
Además, instruyen a informar a los centros de salud para que no se utilicen los productos de ese lote, notificar al Servicio Autónomo de Contraloría Sanitaria, preparar el informe de los establecimientos en los que tenían esa solución, y notificar los efectos adversos asociados a la utilización del medicamento.
La bacteria acinetobacter, explicó la infectóloga Ana Carvajal, puede producir infección en la sangre e incluso sepsis. “La indicación para estos casos es hacer un hemocultivo, y dar antibióticos antes incluso de tener el resultado, lo cual es un poco difícil en los hospitales por la escasez”.
El ex ministro de Salud, José Félix Oletta, detalló que esta bacteria se adquiere habitualmente de forma intrahospitalaria, cuando se utilizan técnicas invasivas y equipos ventiladores, sondas, catéteres. «Ya hubo antecedentes en Venezuela de esta bacteria altamente resistente a antibióticos y en 1998 fue histórica la contaminación de Gerdex desde su elaboración por esta bacteria por lo que el MSAS decomisó ese producto y suspendió preventivamente la producción en enero de 1999″, explicó el médico.
Además, aseveró que el casi actual revela malas prácticas de producción. «Contraloría Sanitaria debe actuar rápidamente para evitar daño a pacientes y riesgo mortal por inoculo de una carga muy alta y directa de bacterias a la sangre».
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