Taylor Swift no sólo mueve a sus fans, también toca el corazón de la economía de ciudades enteras: estamos en la era de la swiftconomía, un momento en el que la presencia de la rubia cantante puede determinar el curso de las finanzas de países enteros
Taylor Swift debe ser ya la cantante más famosa de esta generación. Con más de 200 millones de discos vendidos y con 12 premios Grammy en casa, no es sorpresa que su The Eras Tour haya sido tan exitosa. De acuerdo con la revista Forbes, en lo que va de esta gira ha recaudado 720 millones de dólares, lo que equivale -según algunas estimaciones- a una economía más grande que la de 50 países. Obviamente, una masa de dinero como esa tiene consecuencias.
Y todavía falta conocer su impacto completo, ya que pronto visitará naciones de Latinoamérica, Europa y Oceanía. Es justo por este gigantesco efecto de The Eras Tour en la economía que los medios han apodado el fenómeno como “swiftconomía”, ya que influye en todo lo que toca, desde el sueldo de los empleados hasta las ciudades en las que ha estado la artista.
El 16 de noviembre de 2022 el sitio de Ticketmaster colapsó por completo después de que 14 millones de personas se metieran para intentar comprar tickets del Eras Tour.
Según una publicación en su blog, la compañía logró vender más de 2 millones de entradas solo en el primer día, rompiendo un récord. Esto causó que los precios en páginas de revendedores subieran. En Ticketmaster los boletos iban desde 50 hasta 900 dólares. Cuando se observó la alta demanda, las otras webs aumentaron los precios desde 800 e incluso hasta 20 mil por un ticket.
Según Bloomberg, en menos de 22 semanas la gira de Taylor Swift obtuvo 300 millones de dólares. Se estima que en promedio cada show recaudó 13 millones. Además del dinero de los consumidores, la artista también gana por los sponsors y las alianzas económicas. Forbes predice que Taylor podría ser billonaria al final del Eras Tour, con una ganancia de aproximadamente 4 mil millones de dólares.
Gracias a la enorme cantidad de dinero que llega con cada show, Taylor Swift no es la única beneficiada. Sus empleados también han podido percibir los efectos positivos de la swiftconomía.
Al final de julio, la artista anunció por Twitter que sus empleados recibieron una buena tajada de su margen de ganancias. En total, se entregaron 55 millones de dólares en bonos al equipo de trabajo de la cantante, desde los bailarines hasta los conductores de los camiones de carga.
Cada camionero del Eras Tour recibió 100 mil dólares de bono. Michael Scherkenbach, CEO de la compañía de transporte Shomotion de Colorado, comentó en una entrevista con CNN que la decisión de la cantante lo impactó, y que más de 50 miembros de su equipo habían recibido el cheque.
Scherkenbach dijo que sus trabajadores llevaban más de 24 semanas viajando con Taylor y que, al pasar tanto tiempo sin sus familias y fuera de casa, se merecían ese dinero. Añadió que la cantidad puede representar un cambio de vida y que para muchos es el pago de universidad de sus hijos o una casa nueva.
Es verdad que trabajar con la cantante puede ser ventajoso, pero las personas que están directamente relacionadas a Taylor Swift son una mínima parte de aquellos ayudados por la swiftconomía. Quienes viven en alguna de las ciudades donde ha tocado la artista, han visto las consecuencias favorables de su visita.
La data de la compañía de investigación QuestionPro reveló que el Eras Tour ha generado 4,6 mil millones de dólares por gastos del consumidor en Estados Unidos. En Colorado y también en Denver, el gasto fue de 140 millones de dólares. En Los Ángeles fue casi el doble, con 320 millones.
Según el Hits Daily Double, además del dinero invertido en entradas para el concierto, los fans gastan entre 1.300 a 1.500 dólares en diversas necesidades durante su estadía en la ciudad donde toca la cantante. El Washington Post estima estos gastos extra en 93 millones de dólares por cada show. Los gastos van a restaurantes, medios de transporte y hasta tiendas de ropa. Y así se multiplican los efectos de la swiftconomía.
Hits Daily Double resalta que los bares y cafés no pierden su oportunidad de generar ingresos gracias a Tay-tay. Así, la semana del concierto ofrecen días temáticos de Swift, bebidas con su cara y comida que representa sus álbumes.
Un reportaje del Washington Post contó que en Washington una cafetería de gatos llamada Neko Cat Cafe hizo dos fiestas temáticas de Taylor Swift- una en cada sucursal- para celebrar la llegada de la artista a la ciudad, y vio un incremento del 140% en su venta de tickets para el evento swiftie comparado con las demás fiestas temáticas que la cafetería normalmente hace. Uno de los locales logró hacer más de 3.000 dólares en un día Swift-temático.
Marcas de ropa como Hazel & Olive, declararon que han vendido mucho en la época del Eras Tour y que han aprovechado para vender prendas que se puedan utilizar en la gira. Cosas como vestidos de lentejuelas, lentes de sol pequeños y chaquetas abrillantadas se pueden observar en las vitrinas al pasar por las tiendas.
Eso no es todo, pues donde hay gente, se necesitan camas. El gobierno de Chicago compartió a través de Twitter que el fin de semana del concierto de Swift rompieron su récord de habitaciones de hotel ocupadas: unos 444 mil cuartos con huéspedes, y los hoteles hicieron más de 39 millones de dólares.
Algo similar ocurrió en Filadelfia, donde la Reserva Federal declaró que el turismo de la región jamás había sido tan rico como en el mes de mayo, cuando se vieron abarrotados de swifties que iban al concierto. Desde la pandemia, mayo de 2023 fue el mes más próspero para los hoteles de la ciudad.
Incluso en Las Vegas, el Eras Tour fue el evento que atrajo más turismo después de la pandemia, no los casinos. Contando a esta y a todas las otras ciudades incluidas en la gira de conciertos, el grupo de análisis de hoteles STR estimó que produjeron 208 millones de dólares en ganancia por habitaciones de hotel.
La cadena AMC Theaters informó que la película “The Eras Tour”, la cual se estrenó hace apenas una semana, se convirtió en el filme de conciertos más taquillero de la historia. En los primeros días facturó más de 123 millones de dólares. Así que la swiftconomía también aporta desde la gran pantalla.
Los cines de Estados Unidos recibieron gran parte de la ganancia, con 92,8 millones de dólares, pero las swifties de todo el mundo no dejaron de ir a bailar y cantar en las salas, pues en los otros 94 países en los que la película salió se embolsaron 30,7 millones.
«The Eras Tour» también se convirtió en el filme más exitoso en preventas de la historia: recaudó 100 millones de dólares en la venta anticipada de entradas que cuestan 18,89 dólares para los adultos y 13,13 para los niños.
Según estimaciones del Common Sense Institute, cada concierto de Taylor Swift genera aproximadamente 140 millones de dólares que van directo al PIB del Estado. Si el tour sigue siendo así de exitoso -y se predice que sí lo será- la Reserva Federal Estadounidense cree que este podría reanimar las cifras nacionales y evitar una recesión en la economía del país.
Además de Estados Unidos, Australia y España ansían la llegada de la cantante, quien actuará en esos países en 2024. Un análisis de Bloomberg mostró que para Australia, el repunte de los gastos en servicios a principios de 2024 podría “impulsar el PIB en un momento en que toda la fuerza de los aumentos de los tipos del Banco de la Reserva de Australia está frenando la demanda». Impensable: países apostando a las bendiciones de la swiftconomía.
Ahora lo que queda es esperar y ver cómo Taylor Swift trae a cientos de fans a las puertas de estas naciones y con ellos, su dinero: una masa que se hace sentir.
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