Victoria's Secret: el regreso más esperado con la magia intacta

«Leímos los comentarios y los escuchamos. El desfile de modas de Victoria’s Secret regresa y mostrará quiénes somos hoy, además de todo lo que conocen y aman: el glamour, la pasarela, las alas, el espectáculo musical y más»: eso fue lo que prometieron en mayo y -finalmente- cumplieron con el show presentado la noche del martes 15 de octubre en el Duggal Greenhouse, en Brooklyn.

El último desfile de Victoria’s Secret había ocurrido en 2018, tras la cancelación del que correspondía al año 2019. La que quizás sea la marca de lencería más conocida del planeta, cimentó una glamorosa imagen de cuerpos perfectos, convirtió a algunas de las modelos más famosas en «ángeles» y su pasarela -estrenada en 1995- se institucionalizó como un evento global. Hasta que las cosas cambiaron.

En 2014, por ejemplo, el desfile atrajo a nueve millones de estadounidenses a sus pantallas, pero en 2018 solo hubo 3,3 millones de televidentes. Para entonces, se había desatado una ola de críticas con señalamientos de sexismo en medio de la ola del movimiento Me Too.

Pero tras la larga pausa, el show debe continuar. Y Victoria’s Secret apostó a algunas de sus figuras emblemáticas como Irina Shayk, Adriana Lima, Eva Herzigova, Kate Moss y Tyra Banks, combinando veteranía con nuevos rostros y añadiendo el toque que demandan los tiempos en materia de cuerpos de otras tallas, especialmente con la presencia de Ashley Graham, quien hizo su debut con la marca.

“Lo que más me emociona es representar a tantas mujeres curvilíneas de todas las formas y tamaños en la pasarela, y me siento honrada de estar en el escenario”, explicó Graham al anunciar su participación: “Mis expectativas para el desfile de este año es que las personas se sientan vistas, que todos se sientan vistos. Dije que sí a VS para que tú te sientas visto”.

Ahora, ya todos la vimos a ella. Y también a Cher y a Lisa y a Tyla. Y esperamos que esta fiesta siga adelante y sea cada vez mejor.

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