Este martes fue divulgada una sentencia del TSJ, donde el máximo tribunal decidió declarar «en estado contumaz» o de rebeldía a Leopoldo López.
El Tribunal señaló que el 18 de noviembre de 2014 López manifestó su voluntad de suspender su comparecencia al juicio, hasta que una Corte Penal de Apelaciones decidiera los recursos pendientes, a pesar de que el ordenamiento jurídico no le otorga tal facultad al acusado, ni tampoco dispone la suspensión del proceso a voluntad de las partes.
Esto quiere decir, que el juicio en el tribunal 28 a cargo de la juez Susana Barreiro, continuará con la ausencia de López, aunque el dirigente político sólo había renunciado temporalmente a su derecho a ser escuchado y recibir las pruebas en audiencia, porque será representado por sus abogados.
La sentencia del TSJ fue hecha pública en el mismo momento en el que en el Palacio de Justicia el tribunal 28 tomaba la decisión de continuar el juicio en ausencia.
Los abogados defensores no se explican esta situación, pues la juez nunca abandonó la sala. Los abogados se preguntaban como se enteró el tribunal 28 de la decisión del TSJ, o si ésta ya estaba tomada antes de empezar el debate oral y público en la sala. Fue la pregunta que se formuló el representante legal de López.
El abogado defensor Juan Carlos Gutierrez afirmó que no se puede calificar a López de rebelde por no querer asistir al tribunal, porque tan solo ejerce sus derechos civiles de querer buscar que la Corte de Apelaciones se pronuncie con respecto a las recomendaciones emanadas del Grupo de Trabajo de Detenciones Arbitrarias de Naciones Unidas y del Grupo de Trabajo Contra la Tortura de este mismo organismo multilateral.
Gutierrez dijo que tal recurso presentado ante la corte de apelaciones ni siquiera ha sido distribuido en el Palacio de Justicia de Caracas, por lo que la Corte de Apelaciones no tiene conocimiento de esa acción introducida por los defensores de Leopoldo López en el mes de noviembre.
«Si tenemos que hablar de contumacia y rebeldía, tenemos que decir que aquí hay contumacia y rebeldía por parte de las autoridades competentes en tutelar el debido proceso en darle la debida celeridad a este caso», enfatizó Gutierrez.
Es por ello que, introdujeron a su vez un amparo y denunciaron ante la juez Barreiro esta situación de dilación de la justicia.
El juicio a Leopoldo López continuará el proximo 15 de enero, sin la presencia del dirigente de Voluntad Popular.
«Quedó acreditado que había infiltrados en la marcha del 12 de febrero», dijo Gutiérrez
Un mensaje de texto difundido por teléfonos celulares y atribuido al presidente Nicolás Maduro fue presentado en el proceso como parte de las evidencias de que la marcha del 12 de febrero de 2014, que devino en violencia y en la muerte de dos personas, fue infiltrada por agentes y afectos del Gobierno, dijeron los abogados.
«De Nicolás Maduro: compatriotas los grupos fascistas violentos que salgan a agredir la sociedad serán uno a uno capturados y castigados severamente con la ley», dice el mensaje de texto registrado en el expediente.
Este es uno de los mensajes que encontraron expertos del CICPC en uno de los 31 teléfonos celulares incautados a personas detenidas en los hechos posteriores a la marcha del 12 de febrero de 2014, y de la cual se derivaron destrozos, quema de vehículos y dos personas asesinadas, delitos por los que la Fiscalía responsabiliza a Leopoldo López como presunto culpable en calidad de «determinador».
Para el abogado del líder de Voluntad Popular, Juan Carlos Gutierrez, quedó acreditado ineludiblemente este martes que había infiltrados en la marcha.
Según el jurista, el contenido de los mensajes eran «llamados del presidente Nicolas Maduro a la revolución, llamados de incitación a apoyar la revolución, de apoyar al gobierno de acudir a marchas y estar presente en actos de esa naturaleza».
Gutierrez indicó que esta información extraída de ese teléfono dejó claro la asistencia a la movilización opositora de personas afectas al Gobierno, que tenían alguna vinculación con el oficialismo. De hecho, a la persona que le incautaron el móvil, la dejaron en libertad.
Afirmó el litigante que, de ninguno de los teléfonos celulares investigados por la policía científica se encontró algún nexo de los manifestantes con Leopoldo López, por lo tanto «es imposible que sea un autor intelectual, un determinador en los hechos».
