Según el mandatario, la Habilitante «surgió como una necesidad de tener poderes que me permitan moverme en el complejo escenario que se abre para Venezuela». Aseguró que Venezuela «no es, ni será una amenaza para los Estados Unidos porque somos un pueblo de paz».
La Habilitante, que precisa para su aprobación el voto de tres quintos de los diputados y otorga poderes especiales para legislar al presidente sin control del Parlamento, fue calificada por Maduro como una «ley antiimperialista» que de ser aprobada le daría «poderes suficientes para defender la paz y el desarrollo integro de Venezuela ante la amenaza de EEUU».
El objeto de la Habilitante, según reza en su artículo primero, sería «reforzar la garantía del ejercicio de los principios constitucionales de soberanía y autodeterminación de los pueblos; protección contra la injerencia de otros Estados en asuntos internos de la República, acciones belicistas o cualquier otra actividad externa o interna que pretendan violentar la paz, la tranquilidad pública y el funcionamiento de las instituciones democráticas por un mundo más seguro».
Esta petición de Maduro se produce a raíz de la orden ejecutiva promulgada ayer por el presidente Barack Obama en la que, además de declarar una «emergencia nacional», se «aplican y amplían» las sanciones a algunos funcionarios venezolanos incluidas en una ley aprobada en diciembre pasado por Washington.
El anuncio de Washington incluye el bloqueo de bienes que pudieran tener en EEUU a siete funcionarios del Gobierno de Maduro, a los que Washington acusa de violar los derechos humanos durante las protestas antigubernamentales que se vivieron en el país en 2014.
Maduro aseguró que, tras el anuncio de la Casa Blanca, jefes de Gobierno de América Latina y el Caribe le han expresado su «incredulidad» e «indignación».
«Incredulidad es el sentimiento que recorre América Latina y el mundo ante la ley aprobada por el presidente Barack Obama contra Venezuela, (…) y el segundo sentimiento indignación, y alrededor de la indignación rechazo, hay un rechazo unánime y general en el mundo», afirmó el presidente venezolano que tildó la orden ejecutiva de EEUU de «aberración histórica».
Luego de un largo contexto histórico-geográfico, Maduro tocó en su primera hora el tema de las elecciones parlamentarias. Aseguró que Washington trata de impedirlas pero que «llueva, truene o relampaguee, vamos a elecciones parlamentarias. Y si ganamos, ganamos. Si perdemos, perdemos. Que el pueblo decida».
Maduro aseguró que cada vez que Estados Unidos utiliza este recurso como Orden Ejecutiva «activan sus fuerzas militares (…) así sucedió en Panamá, sucedió en Libia». Hizo un llamado a la unidad ante lo calificó «la mayor amenaza que ha sufrido Venezuela (…) más allá de las diferencias políticas a unirnos como un solo puño».
En su rango de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, ordenó la realización de un «ejercicio militar defensivo especial» el próximo sábado 14 de marzo en todas las siete REDI (Regiones Estratégicas de Defensa Integral). Aseguró que Washington «tiene listo los decretos para un bloqueo comercial, económico y energético. Un bloqueo naval» al cual prometió enfrentar con éxito.
Sobre las funciones de la Habilitante
A las 8:15 de la noche, cuando llevaba casi dos horas de discursos Maduro explicó que la Habilitante que ha pedido servirá «para evitar que se active el Estado de Excepción» consagrado en la Constitución. También aseguró que será para acabar «con los quinta columnas que socavan desde dentro al país» y a quienes acusó de hacer un trabajo interno a través de sus redes sociales y otros medios «para justificar una invasión» por parte de Estados Unidos.
«Lo digo temprano: pido a Dios que no se den cuenta de la realidad macabra tarde, que los ilumine a todos», dijo sobre su «certeza total» de que esta batalla por la defensa de Venezuela de nuestra paz «nosotros la vamos a ganar».
Estados Unidos, dijo, «ha hecho la declaración más grave contra Venezuela y es injusta injustificable, amenazante, peligrosa, Venezuela tiene que ponerse de pie y reaccionar como un solo pueblo con la verdad».
Solicitó un comunicado público a la Asamblea Nacional pidiendo que se le solicite a Obama derogar esa ley que «amenaza a Venezuela con un bloqueo» . También demandó pedirle a ese país que no se meta en los asuntos internos «que son solo de los venezolanos».
Pidió a sus seguidores «no hacer caso de los encuestólogos» y dijo que tienen la certeza de que el chavismo ganará las elecciones parlamentarias que fijará el CNE cuando tenga que decidirlo. Reiteró que aceptarán los resultados «sean los que sean».
«Esos asuntos los decidimos aquí, no en Washington», dijo.
Se ofreció a firmar «ya» un documento con el compromiso de que va a reconocer el resultado electoral que sea.
